Es muy interesante e importante dar seguimiento al Consejo de Estabilidad del Sistema Financiero en México (CESF), conformado con personalidades como el doctor Carlos Urzúa, titular de la SHCP, el maestro Alejandro Díaz de León Carrillo, gobernador del Banxico, el ingeniero Adalberto Palma Gómez, presidente de la CNBV, además de los titulares de la Comisión Nacional de Seguros y Fianzas (CNSF), de la Comisión Nacional del Sistema de Ahorro para el Retiro (CONSAR) y del Instituto para la Protección al Ahorro Bancario (IPAB).

En su último documento que comprende el análisis del 1 de abril de 2018 al 31 de marzo de 2019 detectaron cuatro riesgos externos y cuatro riesgos internos que amenazan el desarrollo del sector financiero mexicano.

A nivel internacional:

1. Desaceleración de la economía global.

2. Escalonamiento de las tensiones comerciales, particularmente entre China y Estados Unidos.

3. Condiciones financieras más volátiles y astringentes en los mercados financieros mundiales.

4. Problemas geopolíticos de diversos tipos como Argentina, Turquía, Italia, Reino Unido y su salida de la Unión Europea.

A nivel interno:

1. El cambio de perspectiva de estable a “negativa” de la calificación soberana de México por parte de algunas calificadoras entre octubre de 2018 y marzo de 2019. Está asociada a algunas políticas públicas y a la nueva estrategia del sector energético, lo que incluye desde luego el estatus de Pemex.

2. Expectativas de menor crecimiento económico afectado por la falta de inversión privada y el menor dinamismo del consumo. También la falta de ratificación del acuerdo comercial, ahora llamado T-MEC por parte de los tres Congresos.

En Estados Unidos, la Comisión de Comercio Internacional presentará su reporte de evaluación del T-MEC el 19 de abril próximo, para que la Cámara de Representantes inicie su proceso de discusión y eventual aprobación en un periodo aproximado de 90 días. Por su parte, México deberá hacer ajustes a la Ley Federal del Trabajo que no será fácil, ya que requiere de dos terceras partes de las cámaras. Mientras que Canadá tendrá elecciones el 21 de octubre próximo, Justin Trudeau ha caído en su popularidad y, además, tiene en contra al Congreso para dar la ratificación si Estados Unidos mantiene el arancel al acero y aluminio.

Parece haber buena intención, pero no será nada fácil. Si esta ratificación por parte del Congreso de Estados Unidos no se tiene en octubre próximo a más tardar, es posible que se desfase hasta 2019.

El sistema bancario mexicano cuenta con un nivel de solvencia importante. Al cierre de febrero, el índice de capitalización asciende a 16.1% promedio del sistema, la cartera vencida de 1.88% respecto de la cartera total, el ROE y ROA en 16.15% y 1.72%, respectivamente.

3. El punto negativo es que la concentración en las fuentes de financiamiento se mantiene con algunas instituciones como BBVA Bancomer, Santander, Banamex, Banorte y HSBC, que juntos concentran prácticamente 70% de los activos del sistema.

4. El tema de la ciberseguridad que día a día muestra riesgos globales y algunos bancos han tenido vulnerabilidades.

En resumen, vemos un sector bancario solvente que podría contrarrestar bajos crecimientos para la economía mundial en 2019 y 2020, pero enfrentará retos importantes como el de ciberseguridad, darle avance a la ley FINTECH y fortalecer a bancos medianos y pequeños a través de una regulación más especializada y menos generalizada con una disciplina fiscal del Gobierno federal.