Foto: Reuters No lo van a poder lograr. Van a tener que pasar por estos cadáveres pues: ministro de defensa  

La cúpula militar de Venezuela ratificó el martes su lealtad al presidente Nicolás Maduro, tras la advertencia del mandatario estadounidense Donald Trump a las fuerzas armadas sobre el riesgo de perderlo todo si no dan la espalda al criticado líder del país sudamericano.

 

En un comunicado leído por el ministro de Defensa, Vladimir Padrino, en compañía de la cúpula militar, se aclaró además que los oficiales continuarán desplegados en las fronteras “para evitar cualquier violación al territorio”, como ordenó Maduro.

 

“La fuerza armada nacional bolivariana jamás aceptará órdenes de ningún gobierno o potencia extranjera”, dijo Padrino en su mensaje transmitido por la televisión oficial.

 

Trump había advertido el lunes por la noche a los uniformados venezolanos, que si siguen leales a Maduro corren el riesgo de perder todo lo que tienen. “No encontrarán un puerto seguro, una salida fácil, ni una forma de abandonar el país”, dijo en un acto ante inmigrantes cubanos y venezolanos.

 

Padrino dijo que fue un acto de “soberbia y terrible insensatez” por parte de Trump y que se pretende dar un golpe de Estado para imponer “un gobierno títere”.

 

“No lo van a poder lograr. Van a tener que pasar por estos cadáveres pues”, afirmó Padrino.

 

Además aseguró que los uniformados permanecen en “obediencia, subordinación y lealtad” a Maduro, que está siendo acosado por una presión internacional sin precedentes para que deje el cargo y se convoquen a nuevas elecciones.

 

TRANSICIÓN ORDENADA

 

La presión sobre Maduro creció en enero, cuando el líder opositor y presidente de la Asamblea Nacional, Juan Guaidó, fue reconocido por buena parte del hemisferio Occidental, países europeos y vecinos como mandatario encargado.

 

Guaidó reiteró el martes en una cita con algunos embajadores europeos en la sede del parlamento, que busca “una transición pacífica y ordenada”.

 

El líder opositor exigió a los uniformados permitir el ingreso al país de ayuda humanitaria desde Colombia, donde se han acopiado toneladas de alimentos y medicinas donados por Washington, firmas venezolanas en Colombia y por el vecino país.

 

“Le ordenamos a la Fuerza Armada Nacional Bolivariana que permita el ingreso ordenado de la ayuda humanitaria y se pronuncie sobre el cese de la usurpación”, urgió Guaidó.

 

Maduro ha dicho que el ingreso de ayuda sería una violación a la soberanía del país, que sufre una escasez de alimentos y medicinas en medio de una profunda crisis económica. El mandatario rechazó lo que llamó “limosnas” y dijo que era un show organizado por la Casa Blanca, a la que acusa de querer derrocarlo.

 

En una señal de apoyo a Guaidó, el presidente de Chile el conservador Sebastián Piñera, aceptó la invitación de su colega colombiano, Iván Duque, y del opositor venezolano para asistir el viernes a un concierto en la frontera con Venezuela, un evento para recaudar fondos para la atribulada nación petrolera.

 

Piñera anunció además que en marzo su país será anfitrión de una cumbre de los presidentes de Argentina, Colombia, Paraguay, Perú, Brasil, Ecuador, Bolivia, Uruguay, Guyana y Surinam, para crear “Prosur”, un foro que “sin ideologismos, sin burocracia” trabaje en la integración regional.

 

 

jhs