En 2017, el Servicio de Administración y Enajenación de Bienes (SAE) obtuvo ganancias por 2 mil 272 millones de pesos por la venta de bienes (muebles e inmuebles) decomisados al crimen organizado o en desuso del Gobierno federal.

Dicha institución, creada en 2001, será la encargada de subastar, en los próximos meses, los aviones, autos, helicópteros, camionetas, motocicletas y autobuses, pertenecientes a la Presidencia de la República y que eran administrados por el extinto Estado Mayor Presidencial.

Por esa subasta, planeada para el 23 y 24 de febrero, el Gobierno federal planea obtener un estimado de 100 millones de pesos (mdp), lo que significa sólo 5% de las ganancias obtenidas en 2017 con la venta de bienes del Estado.

El SAE administra los bienes decomisados, asegurados, dados en dación y de baja por el Gobierno; pero al quedar libres y en pleno uso del Estado, éstos son vendidos mediante subastas catorcenales y mensuales en línea, a martillo o sobre cerrado.

A su vez, artículos decomisados como licor, drogas, armas, entre otros, son destruidos; la ropa, calzado, libros, juguetes, automóviles, son donados a municipios de alta marginación.

Aunque todavía no existen cifras consolidadas, se estima que las ganancias, por las ventas de activos del Estado, superarían los 17 mil millones de dólares durante el pasado sexenio (2012-2018).

De acuerdo con la Cuenta Pública 2017, el Sistema de Administración y Enajenación transfirió a la Tesorería de la Federación, dos mil 272 millones de pesos, producto de la venta de activos.

Entre las ventas, de las cuales el SAE obtuvo mayores ganancias, resalta una nave industrial ubicada en Toluca y decomisada al empresario chino Zhenli Ye Gon, misma que alcanzó un precio de 181.7 mdp.

La mansión en donde fue abatido por el Ejército, Nacho Coronel, ex líder del Cártel de Sinaloa, es otro de los bienes asegurados que mayores ganancias han dejado al Estado con 6.1 millones de pesos.

Además, en su informe de la Cuenta Pública 2017, el SAE informó que destruyó 7.3 millones de bienes, entre armas, drogas y otros artículos, sin que se conozcan mayores detalles.

A su vez, donó a municipios de alta marginación toneladas de ropa, calzado, juguetes y vehículos.

Por separado, una inspección realizada por la ASF al SAE, contiene 10 recomendaciones para el eficientar el control de los bienes asegurados hasta su venta, en donde sugirió establecer mecanismos de control y supervisión para el registro de los bienes asegurados.

LEG