Roma.- Los trabajos para la demolición del puente Morandi, en la ciudad italiana de Génova, cuyo derrumbe en agosto pasado dejó 43 muertos y cientos de desplazados, comenzaron hoy con el desmantelamiento de un primer segmento de casi 40 metros de largo y más de 800 toneladas.
De acuerdo con los responsables de la demolición, los trabajos podrían extenderse hasta junio próximo debido a lo delicado de la operación, ya que se trata de un puente colgante -a unos 48 metros de altura- que tiene partes arriba de plataformas ferroviarias y de edificios, los cuales fueron desalojados tras el accidente.
Tras el derrumbe, ocurrido el 14 de agosto pasado, quedaron dos bloques de construcción a cada lado del puente, que comenzarán a ser removidos.
El puente Morandi, inaugurado en 1967, tenía una longitud total de mil 180 metros, 18 metros de ancho y un peso total de tres mil toneladas. Sus pilares llegaban hasta los 90 metros de altura y una luz, o distancia entre los apoyos, máxima de 210 metros.
Miles de toneladas de acero, hormigón y asfalto ya se han retirado del área donde el tramo del puente se derrumbó.
De acuerdo con el ministro italiano de Transporte, Danilo Toninelli, empieza a verse el resultado del desmantelamiento del puente “que fue mal gestionado por quienes se aprovecharon económicamente”.
Aseguró que se construirá su sustituto que contará con cubierta de acero de mil 100 metros de longitud y tendrá cada 50 metros un pilar elíptico.
fahl