FOTO: reuters Adam Levine comenzó su interpretación en un escenario en forma de M, seguido de una breve participación de Bob Esponja, y los raperos Travis Scott y Big Boy completando el espectáculo  

Después del Super tazón del año pasado con la participación de Justin Timberlake, Maroon 5 lidera la actuación del Super Bowl LIII del medio tiempo.

 

Pese a toda la polémica que se dio por la cancelación de la conferencia de prensa de Maroon 5 el miércoles pasado, la presentación de Adam Levine y compañía causó furor entre la afición en el Mercedes-Benz Stadium.

 

 

Grandes sorpresas, como una banda universitaria, y varios videos en las pantallas gigantes, fueron los ingredientes principales de un show de medio tiempo que ha perdido a las grandes bandas de rock como lo era en antaño con la NFL.

 

 

Un escenario lleno de luces que formaban una M gigante estaba en el centro del campo, y donde apareció Adam Levine para entonar una de las melodías más famosas de la banda, pero cuando comenzó a sonar She Will be loved, soltaron unos globos blancos y los más de 70 mil fans unieron sus voces a la del grupo.

 

 

Adam Levine comenzó su interpretación en un escenario en forma de M, seguido de una breve participación de Bob Esponja, y los raperos Travis Scott y Big Boy completando el espectáculo.

 

 

La presentación simuló un concierto y había cientos de personas a un costado del escenario que gritaban enloquecidas cuando Levine se acercaba a ellas.

 

Poco más de 15 minutos Maroon 5 interactuó con la gente en el Mercedes-Benz Stadium, pero en realidad no hubo química con la gente, pues miles aprovecharon para ir a los sanitarios, o incluso salir por alimentos y bebidas. Se notó con los huecos que se apreciaban en las gradas.