Foto: Especial Los especialistas concluyeron que la calidad estética de las imágenes influye en la personalidad  

Con miles de participantes que aceptaron mostrar sus fotos de perfil para un estudio, especialistas realizaron un análisis detallado de la personalidad de cada uno de ellos, según los gestos, la postura, el tono de las imágenes e incluso el entorno donde aparecían retratados.

De acuerdo con los autores de la investigación, publicada en AAAI Digital Library, las fotografías de perfil se pueden relacionar con el modelo Big Five, que refiere a cinco rasgos de personalidad: responsabilidad, extroversión, amabilidad, inestabilidad emocional y nuevas experiencias.

Las personas más responsables, explicaron, aparecen en fotografías más naturales, coloridas y brillantes. De los cinco rasgos de personalidad, son las que comunican más emociones positivas.

A los extrovertidos, se les identifica a partir de su propia sociabilidad que los caracteriza, al retratarse alrededor de un grupo de amigos, con muchos colores y una sonrisa que apunta directo a la cámara.

De todos los tipos de personalidad, quienes son amables se muestran con fotografías menos cuidadas y editadas, aunque se pueden apreciar con una sonrisa o emociones positivas con su expresión facial.

Las personas más inestables aparecen con rostros apenas visibles, o escondidos por sombreros, bufandas, manos o el propio cabello, además de tener menor tonalidad.

Las personalidades más creativas, capturadas con las mejores cámaras, se manifiestan en tomas y ángulos artísticos poco comunes, donde el rostro ocupa la mayor parte del cuadro.

Los especialistas concluyeron que la calidad estética de las imágenes influye en la personalidad: más calidad en las personas abiertas y menos en los inestables; mientras que los responsables, amables y extrovertidos prefiere mostrar el rostro, los dos últimos con especial atención en el color.

LEG