La caravana de migrantes de Guatemala, El Salvador y Honduras avanzará desde las 5:00 horas de este viernes hacia Donají, comunidad del municipio Matías Romero, en el sureño estado de Oaxaca, en su ruta hacia la Ciudad de México.
Durante una asamblea la noche de este jueves, Gina Morales, integrante de Pueblos sin Fronteras, organización que acompaña al contingente, expuso que deberán recorrer 45 kilómetros para llegar hasta ese punto.
Ante un cúmulo de centroamericanos desesperados y con ganas de avanzar más kilómetros, consideró pertinente todavía permanecer en territorio oaxaqueño, ya que esperan poder dar pronto buenas noticias en el tema del transporte que los acerque a la capital mexicana.
Integrantes de la comisión del éxodo centroamericano también exhortaron a sus connacionales a pararse a las 4:00 horas para recoger la basura y las carpas y, de esta forma, agradecer la solidaridad del pueblo oaxaqueño.
El contingente llegó este jueves a Matías Romero, en la región del Istmo de Tehuantepec, donde hasta la noche los habitantes continuaban llevando comida al refugio que se instaló en el Deportivo Ejidal “Emiliano Zapata”, ubicado en la entrada de la localidad.
En un ambiente oscuro, los migrantes se formaban para recibir la cena, mientras otros, la mayoría niños y mujeres, dormían ya porque tendrían que despertar muy temprano para continuar buscando el “sueño americano”.
Provenientes de Juchitán de Zaragoza, donde estuvieron dos días, algunos migrantes llegaron por “aventones”, otros pagaron transporte y una mayoría emprendió el viaje desde las 6:00 horas a pie y bajo los fuertes rayos del Sol por la carretera La Ventosa-Acayucan.
Otros de los que integraban la caravana decidieron avanzar hacia el centro de Matías Romero, donde estaba restringido por parte de autoridades municipales. Dormían a las afueras de algunas viviendas, pedían limosna en los cruceros, pero también recibían alimentos por parte de los pobladores.
Desde la mañana del jueves los integrantes de la caravana de Centroamérica, por primera vez, cuestionaron si la decisión sobre la ruta que decidieron los dirigentes fue la correcta.
El miércoles por la noche, en Juchitán, quienes coordinan el contingente anunciaron que se dirigirían a Jalapa del Marqués, sin embargo la mañana del jueves se indicó que el trayecto había cambiando y la siguiente parada era Matías Romero.
De inmediato el descontento se dejó mostrar por parte de los migrantes, quienes preguntaron por qué había cambiado la ruta del viaje de último momento, incluso se organizaban para tomar la ruta anterior, donde para llegar a la Ciudad de México tendrían que cruzar la capital oaxaqueña.
Ante esa situación los líderes salieron a explicar que transitar por la carretera que los lleva a la ciudad de Oaxaca significaba muchos peligros por ser angosta, además de que en ese camino no hay hospitales y se registran casos de niños enfermos.
También señalaron que habían indicado que pasarían por la Ciudad a de Oaxaca, ya que consiguieron poco más de 70 camiones para el traslado, pero de último momento el apoyo fue negado.
fahl