Foto: Reuters La Memoria Educativa señala que de 318 unidades subvencionadas oficiales en 1998, para 2015 quedaban 117  

CARACAS.- La crisis económica que golpea a Venezuela en el último año también ha impactado al sector educativo, pues han desaparecido 215 planteles públicos en 2018, pero también se ha extendido a grupos privados, de acuerdo con una investigación de un centro asociado a la Universidad Central.

 

La Memoria Educativa de 2018 señala que hay 215 planteles estatales menos, 175 municipales y 166 autónomas.

 

La Asociación Nacional de Instituciones Educativas Privadas (Andiep) también asegura que en Nueva Esparta cerraron cinco colegios y otros tres en Portuguesa.

 

“No me sorprendería que en septiembre más de uno no pueda iniciar”, dijo Pedro Castro, presidente de la Cámara Venezolana de la Educación Privada, publica Crónica Uno.

 

Según Memoria Educativa Venezolana, un espacio de investigación inscrito en el Centro de Investigaciones Educativas de la Universal Central de Venezuela, ante la falta de docentes las instituciones no tienen cómo cubrir todos los grados.

 

Sin embargo, tampoco hay alumnos: solo en primer grado se han retirado 10 niños de un grupo de 22. El gasto en el pago de personal y mantenimiento del plantel tampoco están seguros de poder cubrirlo.

 

La cifra de inflación —128.4% solo en junio, según la Asamblea Nacional— le come los ceros a las finanzas de los colegios, aunque viven sacando cuentas, los presupuestos cada vez más son imposibles de ejecutar.

 

La situación ha llevado a otros cinco colegios en Nueva Esparta al cierre y tres en Portuguesa, indica Fausto Romeo, presidente de la Asociación Nacional de Instituciones Educativas Privadas (Andiep) sección Caracas.

 

Afirma que se están construyendo bases totalmente debilitadas para el inicio del nuevo año escolar: “Significa que estamos finalizando un año escolar en crisis, donde se violentó el derecho humano a la educación. Tiene elementos para que se inicie en conflicto el periodo 2018-2019”.

 

La presidenta de la Asociación Venezolana de Educación Católica, Trina Carmona, expresa: “Tenemos cuatro escuelas que requieren incorporarse al convenio de subsidio. Otras tres están en proceso de cierre, los estudiantes se siguen atendiendo, pero en otros centros. Mientras que un maternal sí cerrará definitivamente”.

 

Reconoce que el convenido de subsidio que mantienen con el Estado les ha permitido cubrir los gastos de personal, pero no cuentan con los insumos y dotación para el funcionamiento de los planteles.

 

De acuerdo con datos del informe 2018 del estado de la educación en el país, elaborado por el coordinador de la línea de investigación Memoria Educativa Venezolana de la Universidad Central de Venezuela, Luis Bravo, entre el período escolar 2013-2014 y el 2014-2015 dejaron de existir 12 planteles privados.

 

La Memoria Educativa señala que de 318 unidades subvencionadas oficiales en 1998, para 2015 quedaban 117.

 

“De acuerdo con información que está generando el ministro de Educación, Elías Jaua, la iniciativa privada tiene dos años en declive. Y este año fue un colapso. El año pasado cayó 15 por ciento y Jaua ha dicho que ha caído más de 50 por ciento con el traspaso de estudiantes de la educación privada a la pública”, destacó Bravo.

 

Para el presidente de la Cámara Venezolana de la Educación Privada (Cavep), Pedro Castro, las expectativas continúan siendo “tenebrosas”:

 

La Encuesta de Condiciones de Vida de 2017 señala que “ha caído la demanda de servicios educativos privados entre la población de los estratos socialmente más aventajados”, al ubicarse en 43 por ciento, luego de que en 2016 fue 55.

 

DAMG