Foto: ADN Sureste La delegación de Ocotlán de Morelos representó la llevada del Guajolote, presente que lleva la familia del novio a la novia  

Oaxaca de Juárez.- Una vez más la máxima fiesta de los oaxaqueños maravillaron a propios y extraños en la octava del Lunes del Cerro, en donde las Chinas Oaxaqueñas fueron las encargadas de iniciar los festejos de la Guelaguetza, con la algarabía de su tradicional convite y el Jarabe del Valle,  portando sus canastas llenas de flores con motivos religiosos, invitando a todo el público a disfrutar de  esta grandiosa celebración.

 

El gobernador Alejandro Murat Hinojosa, presidió la tercera edición de la fiesta  acompañado de la Diosa Centeótl 2018, Francisca Pérez Bautista, su esposa Ivette Morán, el presidente municipal, José Antonio Hernández Fraguas,  su esposa, Lorena Córdova, y demás invitados.

 

Frente a miles de asistentes en un auditorio Guelaguetza a su máxima capacidad, la delegación de San Sebastián Tecomaxtlahuaca bailó la “Danza de los Diablos” que asombró a los  asistentes por su gallardía, esta danza fue utilizada para la conversión de los naturales de la Nueva España y se baila en pareja cruzándose entre sí, con giros al ritmo de la chilena mixteca.

 

Los danzantes de la Villa de Tututepec interpretaron el “Fandango de Varitas”, baile de origen prehispánico que se baila en las mayordomías o para rendirle culto a las ánimas del purgatorio.

 

San Pedro Ixcatlán ejecutó  Na, Puta Chichi y la Borrachita, sones mazatecos de este  municipio perteneciente a la región baja de la etnia mazateca  y el alto Papalopan.

 

El Jarabe de la Rosa y Chilenas fueron presentados por San Francisco Sola, sones soltecos que se bailan en fiestas patronales, bautizos y bodas, acompañados por un pequeño conjunto musical compuesto por un violín, una guitarra y un cajón.

 

La delegación de Huautla de Jiménez bailó de forma magistral sus sones mazatecos como la tortolita, flor de naranjo, flor de liz, flor de piña, anillo de oro y la paloma, todos  inspirados en la región de la Cañada.

 

Los  hermosos huipiles de las bailarinas  lucieron en lo alto del cerro al son de la  música  originaria  de la tierra mágica de María Sabina.

 

Las bellas mujeres de San Juan Bautista Tuxtepec conquistaron una vez más a todos los asistentes al Cerro del Fortín con su Flor de Piña, baile que representa la alegría de la mujer por la cosecha de esta fruta.

 

Estas mujeres portaron  con gran orgullo sus vistosos  huipiles finamente bordados de diversos colores y formas dándole  realce  a su baile.

 

Teococuilco de Marcos Pérez interpretó el Jarabe de la Botella, juego distintivo de esta comunidad en que los compadres demuestran su agilidad para tirar y levantar una botella con un solo pie  acompañado con versos que invitan a bailar.

 

La delegación de Ocotlán de Morelos representó la llevada del Guajolote, presente que lleva la familia del novio a la novia, un viernes anterior al domingo en el que se celebra la boda, la familia de la novia es quien baila los presentes  y los guajolotes son bailados por ambas familias, al terminar el jarabe la fiesta continúa compartiendo los alimentos.

 

En este Lunes del Cerro la Danza de la Pluma fue ejecutada por la delegación de San Bartolo Coyotepec, esta es una danza de conquista compuesta por marchas, himnos,  chotis y sones, en que se representa la conquista de los aztecas por parte de los españoles a su llegada a la Nueva España.

 

Los Sones los interpretó Juchitán de Zaragoza, pueblo zapoteca del Istmo de Tehuantepec, Guenddanabanni (Ama la Vida), la Llorona, la Martiniana, Fandango Teco, Laureana, el Vals Zapateado y el Feo arrancaron los aplausos de los asistentes al auditorio.

 

Las mujeres del Istmo lucieron sus  trajes, unos de los  más bellos de todas las regiones de Oaxaca.

 

Santa María Huatulco mostró  sus Sones y Chilenas que recrean las vivencias  del pueblo viejo y el actual a lo largo de los años distinguiéndose dentro del repertorio de la región de la Costa.

 

La Mayordomía a la Virgen de la Asunción fue representada por Tlacolula de Matamoros, esta es una de las tradiciones  más arraigadas en los Valles Centrales, y  muestran un conjunto de celebraciones pagano religiosas en honor al santo patrón en la que participa toda la población aportando su Guelaguetza.

 

La delegación encargada de cerrar esta primera edición del segundo lunes del Cerro  fue la de Santiago Jamiltepec con sus Sones, Juegos y Chilenas,  tradicionales de la comunidad acompañados de versos picarescos de amor y desamor que divirtieron a los turistas y oaxaqueños presentes en  esta fiesta multicultural.

 

Quien se vio interrumpiendo a los turistas asistentes a esta muestra cultural de los oaxaqueños fue el productor Juan Osorio quien aprovechándose de la benevolencia del gobierno del estado, hizo todo un show para grabar escenas de su telenovela “Mi marido tiene más familia” subiendo y bajando a un costado del palco oficial en donde se encontraba el gobernador Alejandro Murat y sus invitados, para dar indicaciones los actores Arath de la Torre y Susana González, en medio de la presentación de la Guelaguetza.

 

 Por su parte, el Mandatario oaxaqueño Alejandro Murat Hinojosa calificó como un “Éxito rotundo,  lleno total en Oaxaca”, las fiestas de Guelaguetza en el segundo lunes del Cerro.

 

“Acompañado por su esposa, Ivette Morán, reiteró que la Guelaguetza era  un  éxito pero porque así lo habían  decidido todos los oaxaqueños”.

 

Aseguró que Oaxaca esta  de moda y lo tiene todo, ya que se había demostrado al mundo la grandeza de esta tierra.

 

“Seguiremos trabajando como lo hemos hecho como desde el inicio de mi administración, seguimos con los proyectos para engrandecer a Oaxaca”, finalizó el Mandatario.

 

De su lado, el titular de turismo en Oaxaca, Juan Carlos Rivera Castellanos, informó que la Guelaguetza 2018 estaba rompiendo cifras récord que  hace 12 años no se tenían  en Oaxaca.

 

En entrevista, señaló que se tenía un pronóstico de  114 mil visitantes y  del 80 por ciento de ocupación  hotelera durante  las dos semanas.

 

“En Huatulco estamos a  mas  del 80 por ciento y en Puerto Escondido al 67 por ciento de ocupación”.

 

Y es que dijo que se registró un exceso de demanda de los espacios en los destinos turísticos.

 

“Teníamos un cálculo de  308 millones de pesos para la capital que si sumamos en el agregado de  todos los destinos  llegaremos a los 700 millones de pesos que espero se puedan superar”.

 

Indicó que al concluir esta máxima fiesta de los oaxaqueños se comenzará la preparación de las festividades para Todos Santos  y la decembrina que es la segunda temporada más fuerte después de la Guelaguetza.

 

“La gente está contenta,  entramos en una nueva etapa y hoy Oaxaca cambió el rostro en términos turísticos”, puntualizó Rivera Castellanos.

 

aarl