Foto: Reuters El jefe de policía de Fallon, Kevin Gehman, identificó al sospechoso como John Kelley O'Connor, de 48 años, quien habría disparado varias veces en la iglesia  

Un tiroteo en una iglesia mormona de la ciudad estadunidense de Fallon, en Nevada, dejó una persona muerta y otra herida, mientras que el presunto autor de la agresión quedó bajo custodia, reportaron hoy autoridades policiales.

 

El tiroteo tuvo lugar frente a los feligreses durante un servicio en un centro de reuniones de la Iglesia de Jesucristo de los Santos de los Últimos Días, dijo Kaitlin Ritchie, vocera de la ciudad, a la cadena Fox 13.

 

El jefe de policía de Fallon, Kevin Gehman, identificó al sospechoso como John Kelley O’Connor, de 48 años, quien habría disparado varias veces en la iglesia y luego se dirigió a su casa, al otro lado de la calle, según el portal The Nevada Appeal.

 

Gehman dijo que O’Connor se rindió ante oficiales de policía y agentes del alguacil, después que las autoridades llamaron a la casa para pedirle que se entregara, informó el canal KOLO-TV.

 

Los investigadores dijeron desconocer aún el motivo del ataque, pero consideraron que pudo estar dirigido a un individuo presente en la iglesia, de la que O’Connor era feligrés.

 

Además de la persona que falleció, el ataque dejó a otra persona con una lesión en la pierna, que no pone en peligro la vida, quien fue hospitalizada.

 

Las identidades de las víctimas permanecían en reserva hasta que sus familias fueran informadas.

 

El domingo por la tarde, el senador republicano por Nevada Dean Heller, publicó en Twitter sus condolencias, anunció estar en contacto con los oficiales que investigan el tiroteo, y se dijo “profundamente entristecido por el acto de violencia sin sentido en Fallon hoy en la iglesia mormona”.

 

“Mi familia y yo estamos orando por todos los seres queridos, asistentes a la iglesia y miembros de la comunidad afectados por esta tragedia”, añadió.

 

La senadora demócrata Catherine Cortez Masto también expreso sus condolencias en Twitter, se dijo “devastada por la horrible noticia del tiroteo fatal”, y agregó: “mi corazón está con todos los impactados. Los lugares de culto deberían ser un refugio seguro. La violencia armada en todo el país debe terminar “.

 

“Expresamos nuestro amor a todos en esta congregación y nuestras oraciones por las víctimas y sus familias”, manifestó a su vez en un comunicado el portavoz de la Iglesia SUD, Eric Hawkins.

 

aarl