Foto: Cuartoscuro Algunos centros no cuentan con línea telefónica para quejas o sugerencias y, en otros casos, no hay respuesta en el teléfono de la Sedema  

En la primera semana de operación de los nuevos centros de verificación vehicular, la Contraloría General de la Ciudad de México identificó seis irregularidades referentes no sólo a la actualización del software, sino en cuestiones básicas como la difusión del nuevo sistema para verificar.

La dependencia local emprendió un operativo para prevenir actos irregulares al interior y exterior de los centros de verificación vehicular, así como deficiencias en la logística.

En algunos establecimientos, los empleados mencionaron que había problemas de conexión con el servidor de la Secretaría del Medio Ambiente local, derivado de la actualización de datos.

Debido a las fallas en el software, el sistema de citas se empalmaba, lo que hacía que no se diera la atención al automovilista en los horarios en que se tenían programados. En el peor de los casos, debía darse nuevas citas.

Otra irregularidad fue que algunos centros no cuentan con línea telefónica para quejas o sugerencias y, en otros casos, no hay respuesta en el teléfono de la Sedema.

Asimismo, no hay un control de las incidencias que reportan los usuarios y, por lo mismo, no se da seguimiento a sus necesidades.

Del total de los verificentros revisados, no se encontró ningún tipo de difusión del nuevo sistema de verificación que le permitiera al usuario conocer los motivos del probable rechazo.

Por último, se ubicó una mínima presencia de gestores que ofrecen servicios de preverificación. Un caso se detectó en el verificentro número IZ 38, en Iztapalapa.

LEGG