FOTO]: CUARTOSCURO Especialistas consideran que la Organización Mundial del Comercio privilegia a los países en vías de desarrollo  

Expertos. Aseguran que el Gobierno actuó de manera inmediata y con todo el derecho para salvaguardar sus intereses

Al iniciar la guerra comercial entre México y Estados Unidos, por la implementación de aranceles al acero y aluminio, académicos consideran que la decisión del Gobierno mexicano de llevar el tema ante la Organización Mundial del Comercio (OMC) le será favorable debido a que este organismo privilegia a los países en vías de desarrollo.

Ayer, la Secretaría de Economía informó que presentará ante la OMC una solución de controversias por las medidas arancelarias que tomó Estados Unidos en su contra por la exportación de acero y aluminio.

La postura de México al acudir a la organización es defender los acuerdos comerciales globales, en el sentido de que el país integra el tratado comercial de Norteamérica (México, Canadá y Estados Unidos), y la medida aplicada por Estados Unidos contraviene este pacto trilateral. Abraham Vergara, coordinador de las licenciaturas en Finanzas, Contabilidad y Gestión Empresarial de la Universidad Iberoamericana, indicó que desde que México es miembro de la OMC desde 1995, ha participado en diferentes controversias, dentro de las cuales, existe un historial de éxito.

Pese a no ser un proceso sencillo, la organización suele proteger a los países que considera débiles. Tal y como fue en su momento el caso del atún, donde por más de cuatro años México peleó con estados Unidos por este producto bajo argumentos ecologistas.

Para ser exactos, dijo, el país ha estado en 24 casos. Ignacio Martínez, coordinador del Laboratorio de Análisis en Comercio, Economía y Negocios de la UNAM, detalló que por esta controversia que presenta México ante la OMC, es muy probable que el falló sea en beneficio dadas las condiciones en las que el país se presenta. Gabriel Pérez, profesor investigador de la Escuela de Gobierno y Economía de la Universidad Panamericana (UP), declaró que con la implementación de los aranceles el inicio de una guerra comercial, desfavorecerá a Estados Unidos por trasladarse a una “economía cerrada”.

Vergara resaltó que en caso de que esta guerra comercial continúe, en un año se podrían ver los efectos negativos para México, ya que debido a los aranceles y la reforma fiscal ocasionarían que algunas armadoras se fueran a EU por ser un país más atractivo en este sentido.

CON MIRAS AL TLCAN

Sobre si esto repercute dentro de las renegociaciones del TLCAN, Pérez de la UP explicó que afecta negativamente las pláticas por lo que es imposible tener un acuerdo antes del 1 de julio, e inclusive Estados Unidos esté pensando en salir del acuerdo comercial por las medidas tomadas por México.

En este sentido, Abraham Vergara, apuntó que estas represalias pueden ser tomadas como una “manita de cochino” por parte de EU para mejorar la renegociación, e incrementar la presión al país para ceder en materia automotriz.

Cabe recordar, que durante el sexenio del presidente Luis Echeverría, ante una crisis provocada por las bajas importaciones, el modelo llegó a ser limitado para responder a las circunstancias económicas internacionales por lo que implementó reformas para afrontar los estragos.

EN MATERIA DEL ACUERDO

Sin afectaciones

WASHINGTON.- La Casa Blanca defendió la decisión del Presidente Donald Trump de imponer aranceles a las importaciones de acero y aluminio de Canadá, México y la Unión Europea y descartó que la relación afecte las relaciones con sus socios comerciales.

“Tenemos fuertes relaciones con México, Canadá y la Unión Europea y continuarán aun cuando estén los aranceles”, señaló la portavoz, Sarah Huckabee Sanders. / NOTIMEX

 

Juan Ángel Espinosa

 

 

JNO