La disminución de la producción petrolera en Tabasco ha sido uno de los factores por los cuales su economía ha venido a la baja en los últimos años.
De acuerdo al estudio Semáforos Electorales Estatales: una radiografía económica, elaborada por la organización civil, México ¿Cómo vamos?, al cierre del año pasado, esta entidad reportó una caída de 3.1% en su tasa de crecimiento económico.
Por su parte, la calificadora Fitch Ratings México emitió el reporte Perfil Crediticio de Entidades Federativas que Celebrarán Elecciones Locales, que precisa que para enfrentar su entorno económico adverso, la entidad necesita aplicar medidas de racionalidad y austeridad.
Gerardo Carrillo, director senior de Finanzas Públicas de Fitch México, comentó que las participaciones petroleras en el estado aumentaron a penas 1.7%.
En una entrevista, el analista explicó que un componente importante de la actividad económica de la entidad -gobernada por el perredista Arturo Núñez- es el petróleo, pero como ha venido en la baja, eso ha impactado en sus ingresos.
Sobre el tema de inseguridad, dijo, si bien todavía no es un tema que preocupe, de seguir ésta, sí podría impactar a otros rubros de la actividad económica de la entidad.
Carrillo aseguró que gracias a la reforma energética, que permitió que lleguen nuevas inversiones del sector petrolero a la zona de Campeche, permeará para el estado de Tabasco, por lo que la recuperación tardaría algunos años, debido a que las inversiones no son de un plazo inmediato.
El analista comentó que el estado cuenta con una calificación crediticia de “A+(mex)”, esto porque tiene margen manejable de endeudamiento de largo plazo.
Trascendió que empresarios no podrán pagar utilidades a sus trabajadores.
JNO