Foto: ARCHIVO 24HORAS Su principal eje de acción, dijo, es hacer un acuerdo nacional de dónde no se debe urbanizar, como son manglares, selvas, montañas o lugares de filtración de los mantos freáticos  

“Negociación sí, imposición no”, es la política que pretende desarrollar Román Meyer a la cabeza de la Secretaría de Desarrollo Agrario, Territorial y Urbano, si se llega a concretar el proyecto de nación del candidato presidencial Andrés Manuel López Obrador.

Como uno de los más jóvenes en el gabinete del morenista, el arquitecto mencionó que está consciente de las complicaciones que tendrá al enfrentarse con una diversidad de partidos políticos dirigiendo los municipios y los estados, pues además de todo, él no es militante de Morena.

Sin embargo, confió en que con la reestructuración de la política pública, en donde los programas de la Sedatu beneficien a todos los territorios, se logrará hacer la conciliación entre todos los niveles de gobierno.

En una entrevista con 24 HORAS, Meyer se describió como un arquitecto formado entre historiadores, cuyo primer acercamiento con la gestión pública se dio mediante la coordinación de programas para recuperar espacios públicos en la CDMX.

“Estrictamente, ya había participado como ciudadano en las elecciones dentro de 2006, sobre todo 2012, pero no había ningún vínculo con Morena al respecto. En cuanto a ideología, desde mi familia ha habido un acercamiento a la izquierda desde el lado de vista histórico”.

Como un primer paso, en caso de lograr encabezar dicha dependencia se “limpiará la casa”, esto ante los resultados de auditorías a la Sedatu, en los que se detectó subejercicio de los recursos.

DEFINIR DÓNDE NO URBANIZAR

Meyer mencionó que la Secretaría ha mostrado una política de vivienda muy desarticulada, la cual no atiende a un gran sector de la población, pues los que tienen un sueldo de hasta cuatro salarios mínimos no son atendidos por parte del Estado, lo que genera que haya mucha vivienda informal.

Su principal eje de acción, dijo, es hacer un acuerdo nacional de dónde no se debe urbanizar, como son manglares, selvas, montañas o lugares de filtración de los mantos freáticos. “Tenemos que ser muy estrictos”.

Cuestionado sobre si su juventud no interferirá con la experiencia que se requiere para lograr alianzas, mencionó que no actúa él solo, sino que hay ocho equipos de trabajo con una designación específica que debe estar lista antes de empezar las elecciones.

JNO