Creo que el turismo ha demostrado ser una de las industrias que mayores beneficios económicos y sociales da a México, al menos es de las actividades económicas que mas PIB aporta a la nación del orden del 16%, y eso es un gran tema cuando un país como el nuestro sigue teniendo niveles de pobreza extremos.

En estos tiempos de campañas electorales, sería muy bueno ver que traen los diversos candidatos a la presidencia de México en el rubro de turismo, si bien el turismo da mucha bonanza, por otro lado ha provocado ejemplos de desigualdad social.

Acapulco es uno, hoy día la bahía parecería que ya vio pasar sus mejores días y no se ve para cuando pueda recuperar el esplendor que tuvo. Para mi gusto hay que hacer del turismo verdaderos polos de desarrollo humano que no tengan ciudades bonitas con cinturones miserables, que el turismo realmente cambie la vida nacional. Cancún al parecer lleva poco a poco ese camino.

En México hoy hay 8.7 millones de empleos derivados de esta actividad, tanto directa como indirectamente, esta cantidad representa el 17% del total de trabajos en el país. Según datos del Consejo Nacional de Evaluación de la Política de Desarrollo Social CONEVAL, en México existen al menos 53.4 millones de personas en situación de pobreza en México.

Enrique de la Madrid, Secretario de Turismo Federal, en más de una oportunidad a puesto el ejemplo de cómo estados con vocación turística han logrado dar frente a la pobreza, como el caso de Quintana Roo, que durante los últimos años ha logrado ser el estado con el mejor desempeño económico, con un crecimiento promedio de 7%; además de los estados de Baja California Sur, Colima y Guanajuato, quienes han logrado un crecimiento de más de 4%, esto sustentado en las cifras que publica el Banco de México.

Hablando de Quintana Roo hace menos de una semana el gobernador de este estado, Carlos Joaquín, hacía una declaración muy importante, él se refirió en un discurso a la necesidad de que el turismo debe beneficiar a los rincones de todo su estado, “necesitamos que la derrama turística, recorra todos los rincones del estado, a fin de mejorar la calidad de vida para todos”.

Este tema es muy relevante para Quintana Roo, ya que es el vivo ejemplo de la desigualdad social, porque mientras es sede de la Riviera Maya, en el municipio de Solidaridad, con una población de 300 mil habitantes, y contando con el 10% de la oferta hotelera del país con más de 45 mil habitaciones, además según datos de la Encuesta Nacional de Ingresos y Gastos de los Hogares (ENIGH) del INEGI esta zona del país posee el ingreso per cápita más importante de México, entre los corredores turísticos; Sin embargo la zona sur del estado posee municipios que se encuentran entre las zonas rojas en cuanto a sus ingresos promedio por población en el país ya que mientras en solidaridad solo 2 de cada 10 pobladores se encuentran en situación de pobreza, en municipios como Felipe Carrillo Puerto 7 de cada 10 pobladores están en esta situación, esto según los datos que publica el CONEVAL

Sin duda esta historia de éxito y fracaso, en un mismo estado es el vivo ejemplo de lo que el turismo puede lograr, esta industria puede ayudar a un país como México, a eliminar esos cinturones de pobreza, es verdad que no todos los rincones del país son aptos para recibir miles y miles de turistas, para lograr eso, el país necesitaría una fuerte inversión en infraestructura carretera y aeroportuaria, que quizá por ahora no es posible, además tendrías que crear productos turísticos en cada uno de los municipios del país, cosa que es aún más complicado.

Pero qué pasaría si en lugar de intentar esto utilizamos nuestros grandes polos turísticos como verdaderos generadores de riqueza para los municipios que se encuentran en su alrededor, retomando el ejemplo de Quintana Roo, qué pasaría si los municipios del sur del estado se convirtieran en los proveedores no solo de mano de obra para los principales polos turísticos del estado, sino que también fueran los proveedores de los insumos que utiliza la industria para brindar sus servicios, desde la parte creativa hasta la mano de obra, sin duda ayudaría al crecimiento más homogéneo en el crecimiento de la economía en un estado, estoy consciente que crear una economía centralista quizá no sea la mejor de las ideas, pero estoy cierto que si el 90% de lo que comemos y de lo que utilizamos en nuestras vacaciones fuera diseñado y fabricado por manos mexicanas ayudaríamos más a la economía de nuestro país.

Por supuesto también está el hecho de que existen estados con una gran oportunidad en el desarrollo de productos turísticos y otros en los que ya existen estos productos, pero no mas no llegan los turistas, ese tema es más de promoción y difusión, donde la Secretaria de Turismo y el Consejo de Promoción turística de México, deben implementar toda su creatividad para que el país logre diversificar su oferta turística.

Señores candidatos a la presidencia, ahi está el turismo una fuente inagotable de recursos para un país maravilloso como es México, lleno de atractivos bellísimos pero lleno de pobreza insultante también.

JMSJ