Restauranteros y comerciantes del Barrio Chino ubicado en el Centro Histórico de la Ciudad de México aseguran que sus ventas bajaron hasta un 50%, luego de que el 18 de septiembre el gobierno de Miguel Ángel Mancera diera el banderazo de inicio a las obras de remodelación.

“Las ventas han disminuido entre un 30 y 50% desde que empezarón a abrir el piso, destacó el dueño de la tienda La nao de china, quién prefirió que su nombre permaneciera en el anonimato.

Los comensales de la zona han recurrido a otras opciones para degustar alimentos, debido a los obstaculos que deben sortear para llegar a las calles del Barrio Chino,“hay mucho polvo y tierra para comer ahí, además el ruido no me deja concentrar” afirmó Lidia García Hernández, clienta reconocida del restaurante “4 Mares”.

Las modificaciones al Barrio de la Luz tuvieron una inversión de 66 millones de pesos con una extensión de aproximadamente 21,600 metros cuadrados según datos del gobierno capitalino.

La fecha preliminar para terminar los preparativos era el 28 de diciembre, sin embargo “se ha retrasado debido a la distribución de los materiales de construcción y el sismo del 19 de septiembre”, destacó el trabajador de la obra, Ramiro González.

El 16 de febrero es año nuevo para la cultura china, por lo que el gobierno capitalino aprovechará la fecha para inaugurar las mejoras del espacio ciudadano.

A pesar de estar emocionados por el cambio de banquetas, los vendedores expresan su preocupación por la perdida de ingresos, “se necesitan priorizar las acciones en la calle Dolores, para evitar pérdidas económicas” comentó el dueño de la tienda “La Nao de China”.

PL