Emma Watson, la protagonista de la nueva versión del clásico de Disney Beauty and the Beast, asegura que se identifica mucho con la princesa por su independencia y su curiosidad. Fue eso lo que le llevó a aceptar el papel, pese a que en 2015 rechazó dar vida a Cenicienta en la nueva adaptación del cuento, un papel que finalmente recayó en Lily James.

 

 

Pero en este caso, el proyecto dirigido por Bill Condon, responsable de las dos últimas partes de la saga Twilight, y coprotagonizada por Dan Stevens (Matthew Crawley en la serie Downton Abbey) era diferente, había algo del personaje que realmente le llamaba.

 
“Si consigo parecerme un poco más a ella es que algo estoy haciendo bien”, afirmó en Londres la actriz, quien se hizo mundialmente popular con apenas nueve años por interpretar al personaje de Hermione Granger en Harry Potter.
Watson, de 26 años y embajadora de buena voluntad de la ONU, considera que la película va dirigida a un público adulto que quiere volver a sentirse como un niño y adelantó que el largometraje (40 minutos más largo que el filme de animación de 1991) introduce novedades respecto a ésta.

 
Se incluyen tres nuevos temas inéditos del laureado compositor Alan Menken, responsable también de la banda sonora del filme original, además de que en esta ocasión se “ahonda mucho más en la vida pasada de Bella en su pequeño pueblo y de Bestia en el castillo”, concluyó.