Para Jaime Serra Puche, el principal negociador del Tratado de Libre Comercio de América del Norte (TLCAN) la primera condición para la renegociación del acuerdo es que ésta debe darse de manera trilateral.

 

 

Al dictar la conferencia magistral Solución a la posible reestructura del TLCAN, organizada por el despacho fiscal Kupfer, el economista calificó como positiva la postura en este sentido expresada  por el gobierno de Canadá.

 

 

La segunda condición es que mientras se desarrollan estás pláticas las reglas actuales de comercio entre las tres naciones se mantengan para evitar la incertidumbre y que, por ejemplo, de un momento a otro estás cambien mediante un tuit, como se ha pretendido en las últimas semanas.

 

 

En un ambiente en donde han privado las emociones y las reacciones a bote pronto, México tiene la obligación de introducir la racionalidad económica en las negociaciones para hacer ver a su contraparte estadounidense que el TLCAN es parte de la solución y no el problema a su elevado déficit comercial.

 

 

Mencionó que en relación con México el déficit comercial de la Unión Americana es de apenas 8.9℅, mientras que con economías como la china es de 56%.

 

 

El secretario de Comercio y Fomento Industrial durante el gobierno de Carlos Salinas de Gortari agregó que la tercera condición para renegociar el acuerdo es asegurar que promueva una mayor integración. Cualquier intento aislacionista, advirtió, atentaría en contra de la competitividad no solo de los países miembros del tratado, sino de la región de América del Norte, la segunda más importante después de la europea.

 

 

El proteccionismo como el que pretende Donald Trump, dijo, va en contra de la tendencia mundial en la que más de la mitad de los acuerdos comerciales se pactan por regiones.

 

 

El experto que encabezó por 14 meses la negociación del TLCAN hace más de 25 años dijo que la tercera condición en el nuevo proceso que se avecina es evitar medidas proteccionista que pudieran desatar una guerra comercial, en la que ninguna de las economías saldría beneficiada.

 

 

“Hoy, en América del Norte no sólo nos estamos vendiendo entre nosotros, sino que estamos produciendo de manera conjunta”.

 

 

De cada dólar que México exporta a Estados 40 centavos corresponden a insumos provenientes de ese país. De cada dólar que exporta  Canadá a EU, 25 centavos son de contenido estadunidense.

 

 

En cambio, dijo, de cada dólar que exporta China a la Unión Americana, sólo cuatro centavos son de insumos estadunidenses.

 

 

“Entonces, pretender imponer aranceles a un auto cada vez que cruce la frontera (para completar su manufactura) restaría competitividad a América del Norte frente a otra regiones del mundo”, mencionó en alusión al sector automotriz, el más integrado en la relación comercial.

 

 

Respecto a la idea “obsesiva” de que Estados Unidos ha perdido capacidad exportadora a causa del TLCAN, aseveró que el déficit comercial de un país se explica por la falta de ahorro y no por un régimen comercial específico.

 

 

“El déficit comercial va a bajar sólo si los americanos ahorran más”, dijo quién en su momento impulsó los acuerdos comerciales de México con Chile, Colombia, Venezuela, Bolivia y Costa Rica.


 

dca