Durante la presentación de su informe anual de labores ante la Comisión Permanente del Congreso de la Unión, Luis Raúl González Pérez, presidente de la Comisión Nacional de Derechos Humanos, recriminó el “desdén” y la “apatía” de las autoridades para atender las recomendaciones, en materia de derechos humanos.

 

Y alertó que 2016 fue un año donde se vivió una crisis de derechos humanos porque acudieron 61 mil personas ante ese organismo par la falta de rendición de cuentas, corrupción, conflicto de intereses, y violaciones a derechos humanos.

 

Esa crisis, dijo, reveló una debilidad del Estado de derecho, y falta de acceso a la justicia.

 

En tribuna, expuso que el caso en una escuela en Nuevo León, donde un estudiante disparó contra maestros y alumnos, reveló que los gobiernos deben trabajar para prevenir el acoso escolar, problemas de depresión y una regulación más estricta para la posesión de armas.

 

Detalló que las dependencias federales que más quejas tuvieron fueron el IMSS, el órgano federal de readaptación social, el ISSSTE, la PF, la SEP, el INM, la PGR, Sedena, Marina y Sedesol.