Desde la creación de Cancún en 1968 no ha habido otro producto turístico con tanta solidez como el  de ‘Pueblos Mágicos de México’.  Es verdad que tiene sus ‘asegunes’  pero Pueblos Mágicos se ha consolidado bien desde su creación en 2001 bajo el sexenio de Vicente Fox.

 

Los Pueblos Mágicos son una marca destino, son una especie de certificación federal  que le permite a una población acceder a las bondades del turismo, recibir muchos visitantes y así detonar su economía local.

 

Muchos pueblos han cambiado radicalmente su fisonomía a raíz de esta certificación, han pasado de ser pueblitos con atractivos a ser pueblos con sólido desarrollo de producto turístico aumentando sus volúmenes de visitantes hasta un mil por ciento más.

 

La idea original de los Pueblos Mágicos fue de Eduardo Barroso Alarcón, ex Subsecretario de Turismo Federal del gobierno de Fox, fue él quien sentó las bases y lineamientos para que los pueblos accedieran a esta distinción.  Entonces serían los pueblos poseedores de una población de al menos 20 mil habitantes,  ubicados a una distancia no superior a 200 km de un centro emisor de turistas,  protagonistas de hechos trascendentales y leyendas y que conserven atributo simbólicos de su cotidianidad intacta, asimismo sus habitantes deben mantener sus costumbres y tradiciones.

 

Hoy existen 111 poblaciones con esta denominación, y  la derrama que dejan es superior a 6 500 millones de dólares anuales muy por arriba de la derrama del turismo de cruceros y turismo fronterizo, los visitan al año más de 4 millones de turistas y es  sin duda es un caso de éxito del turismo cultural de México que pone en valor poblaciones del país que tienen atributos para el desarrollo de la actividad económica del turismo. A pesar de mucho detractores y de algunos pueblos mágicos que han infringido las normas, el programa se mantiene fuerte y caminando.

 

Tal fue su éxito que Eduardo Barroso fue invitado por el gobernador del Estado de México Eruviel Ávila Villegas vía Rosalinda Benitez su secretaria de turismo estatal para desarrollar un programa para la entidad que pudiera poner en valor pequeñas localidades con vocación turística del Estado de México y que, a futuro pudieran considerarse aspirantes a lograr el nombramiento de Pueblo Mágico, este programa hoy día se llama Pueblos con Encanto. Actualmente hay 22 Pueblos con Encanto en el Estado de México, Lerma, Tenango del Valle y Zinacantepec son los más nuevos con menos de un año de su nombramiento.

 

De los primeros 17 Pueblos con Encanto, 7 de ellos hoy ya son Pueblos Mágicos. Así los Pueblos con Encanto son una especie de “liga de ascenso” para aspirar a convertirse en Pueblos Mágicos todo bajo la batuta de Barroso y su consultoría de nombre EB turismo.

 

Resulta muy interesante el trabajo que se está realizando con los diferentes pueblos del Edomex, los llamados Pueblos con Encanto ya que es el semillero que tal vez necesiten los demás estados de la república para profesionalizar sus pueblos y aspirar a engrosar la lista de los 111 Pueblos Mágicos de México. ¿Queremos más Pueblos Mágicos? Sí, pero perfectamente perfilados y calificados. Eso sería muy bueno para nuestro país.