OAXACA. Entre gritos de ¡cura violador de jóvenes! y ¡mentiroso!, amigos y familiares de Lenin Moisés López exigieron al sacerdote Carlos Franco Méndez Pérez, reconocer que abusó sexualmente del joven, ya que aseguraron hay cámaras de seguridad y testigos que lo señalan por ese hecho.
Apoyados por la coordinadora del proceso evangelizador de la Catedral Metropolitana, perteneciente a la Arquidiócesis de Antequera Oaxaca, Laura Antonio Zaragoza, mujeres y jóvenes irrumpieron en la conferencia de prensa diaria del vicario de la Catedral, Carlos Franco, acusado de la violación a Lenin Moisés López Jiménez.
En medio de los gritos y las acusaciones, la mamá de Lenin con lágrimas en los ojos le reclamó que todo lo que había declarado ante la justicia era mentira, ya que nunca le había llamado tal como lo dijo en su declaración para decirle que había sucedido con su hijo.
Al sacerdote no le quedó otra opción más que salir corriendo del lugar donde ofrecería su postura, acompañado de su abogado, ya que fue imposible controlar a los católicos que llegaron al sitio a enfrentarlo.
En el comunicado que comenzó a leer el cura manifestó que desde que tuvo conocimiento de las acusaciones que se le hacían acudió a las autoridades para presentar su verdad.
“Niego rotundamente el delito del cual me acusaron, como sacerdote guardaré en secreto la infamia cometida en contra de mi persona, soy inocente de las acusaciones que me hicieron, así lo probé ante el juez y así lo acredite, por eso estoy libre”, señala.
“A pesar de que fui objeto de violaciones a mis derechos humanos, enjuiciamiento y sentencia a través de los medios de comunicación, afectando mi nombre, mi familia, mi ministerio y al arzobispo sinceramente los he perdonado”.
Jóvenes de Lenin persiguieron al sacerdote Pérez Méndez hasta afuera del recinto, mientras que a Lenin se le vio llorando y siendo consolado por compañeros.
Previo a este sucesos, Lenin López Jiménez informó en conferencia de prensa que su único fin era desenmascarar al sacerdote y evitar que otros menores pasaran por la misma situación.
“Exijo justicia, se ha dicho que no ha sido la primera vez que ha pretendido abusar de chicos, pero por miedo no lo han denunciado” y agregó “yo tengo pruebas de que me buscó después de todo lo que pasó, diciéndome que regresara a la Catedral”.
Lamentó que al tener conocimiento de estos hechos, el arzobispo José Luis Chávez Botello les haya pedido discreción, además de que nombró como encargado del asunto al secretario canciller Lorenzo Fanelli, quien nunca hizo nada para aportar mayores elementos a la investigación.
“Se entregaron las pruebas suficientes pero no las aceptaron también se negaron a recabar más pruebas como las cámaras de seguridad del curato que nunca las entregaron, ahí está todo”, sostuvo.
Por su parte, Laura Antonio Zaragoza reiteró que como testigo aportó todos los elementos que evidenciaban el abuso que cometió el prelado.
“Demandamos justicia porque si regresa a una iglesia es un peligro para los menores que ofrecen su servicio en la iglesia, él es culpable, yo lo vi”, finalizó.
A gritos de ¡cura violador! increpan a vicario de la catedral de Oaxaca
