¡Uyyy, qué miedo! Podría responderle Andrés Manuel López Obrador a Margarita Zavala, quien anda diciendo que el tabasqueño “ya se dio cuenta que soy un peligro para él… que le preocupo mucho”.

 

En una entrevista que concedió a El Universal, la esposa del ex presidente Felipe Calderón dijo una bola de sandeces que no tienen desperdicio, como  que confía que el PAN la designe su candidata a la Presidencia de la República para 2018; que su marido no sería un lastre, sino una fortaleza;

 

que su jefe Ricardito Anaya no puede ser candidato y dirigir los procesos electorales (dejó entrever que está muy chiquito, según los malosos); que Rafael Moreno Valle no lo ve peligroso… Ah, y que está lista para ser Presidenta de la República.

 

Hace dos años, cuando la señora Zavala pretendía un escaño en la Cámara de Diputados en el período 2015-2018, para desde ahí construir su candidatura presidencial, los observadores políticos reflexionaron sobre algunos “peros” que tendría la “seño” Margarita en su hipotético camino hacia su obsesión.

 

En primer término, decían, tendría en contra el mal gobierno que encabezó su esposo, a quien cada día que pasa le encuentran más trapitos para sacarle al sol en términos de ineficiencias, omisiones, costosas equivocaciones y corruptelas de funcionarios de primer nivel que formaron parte de la administración calderonista.

 

Por otra parte, la señora Zavala tendría en contra el nefasto antecedente dejado por Josefina Vázquez, quien, en una aciaga jugada del destino tuvo en sus manos la primera candidatura presidencial femenina del PAN, no supo qué hacer con ella y la hizo trizas.

 

Por último, no hay en su débil currículum profesional y en su lánguida trayectoria política suficientes elementos que permitan suponer la posibilidad de que su candidatura presidencial pudiera ser fuerte, consistente, promisoria y atractiva para el electorado.

 

Si llegara a formar parte de la próxima legislatura federal y su figura creciera en San Lázaro, agregaban los observadores, entonces los panistas podrían pensar en Margarita Zavala como abanderada presidencial para enfrentar a políticos de la talla del morenista Andrés Manuel López Obrador…

 

Como todos sabemos, a la señora “le dieron un cuerno”, por lo que hoy los mismos observadores reflexionan: si en 2015 el PAN no le quiso regalar a Margarita Zavala ni una candidatura “pluri”, ¿por qué le va a regalar la candidatura presidencial de 2018?

 

Agenda previa

 

Don Carlos Rello Lara, director del Fondo de Empresas Expropiadas del Sector Azucarero (FEESA), pasará a las páginas de la historia de la industria azucarera mexicana porque logró lo que muchos no pudieron o no quisieron hacer. Cuando el presidente Enrique Peña Nieto lo designó para ese cargo –hace tres años–, le encomendó la venta de nueve ingenios expropiados que se habían quedado en la panza del gobierno después de la expropiación de 2001. Nadie dentro y fuera del gobierno creía que los podría vender. “¡Regálalos, nos sale más barato!” le aconsejaron algunos. Como buen conocedor del sector, les respondió: “Por qué regalarlos si podemos obtener por ellos ocho mil millones de pesos, siempre y cuando los pongamos atractivos”. “¡Estás loco!” le espetaron.

 

A estas alturas de la administración, Rello Lara está a punto de conseguir más de ocho mil 700 millones de pesos. Ya vendió, el año pasado, siete fábricas en seis mil 782 millones, y el 26 de agosto, el SAE licitará los dos restantes, por los que pide un mínimo de mil 390 millones. El mercado del “polvito blanco” registra un “boom” de precios, por lo que siete inversionistas se inscribieron para ofertar y pagar incluso dos mil millones por los dos últimos.

 

¡Merece los honores, pues!