Mientras los integrantes de la Asamblea General Politécnica (AGP) Donovan Garrido y Amaranta Martínez temen una eventual privatización encubierta del Instituto Politécnico Nacional,  directivos de la institución niegan que eso vaya a pasar.

 

Donovan Garrido, quien formara parte de la AGP durante el movimiento de 2014, explicó que para muchos de sus compañeros la privatización se está dando de manera sutil, esto al cambiar conceptos en los reglamentos internos para así justificar los pagos de servicios educativos.

 

Según Garrido, estos cambios comenzaron con la reforma al Reglamento General de Estudios de 2011, con lo cual los cursos, talleres, seminarios y diplomados se consideran como Servicios Educativos Complementarios, por lo cual se cobra una cuota de recuperación.

 

“Todo esto es educación, pero le cambiaron el nombre porque como la Ley Orgánica dice claramente que toda la educación que brinde el Politécnico debe ser gratuita, pues no podían cobrar por esto. Es una forma de darle la vuelta a las reglas”.

 

Así, el líder del movimiento de 2014 dijo que el objetivo final es reformar los artículos 5 y 6 de la Ley Orgánica, para quitarle la gratuidad a la educación que da el IPN, y así dejar abierta la posibilidad de que se cobre lo que sea en las cuotas semestrales.

 

Por su parte, Amaranta Martínez, representante de la vocacional 7 en la AGP, explicó que también existe el temor de que gente externa al IPN se filtre en la organización del Congreso Nacional Politécnico, lo cual también es una amenaza para el carácter público y gratuito de la institución.

 

“Nosotros vemos injerencias externas como la del ex director (Miguel) Correa Jasso, quien se reunió la semana pasada con compañeros de la voca 13 y él mismo dijo que era de parte de la SEP”, dijo Martínez.

 

Quien ve un panorama diferente es José Enrique Villa Rivera, quien fuera director del IPN entre 2003 y 2009, pues negó que haya un intento de privatizar a esta institución.

 

“Es un rumor (la privatización), no hay ninguna evidencia de ninguna iniciativa que se haya tomado ni internamente en el Politécnico, ni externamente en el gobierno federal que vaya enfocado a un esquema de privatización del Politécnico Nacional”, dijo.

 

El académico aseguró que en caso de que surja una iniciativa privatizadora del IPN, será toda la comunidad la que salga a manifestarse como ocurrió en 1942, cuando fue la primera huelga politécnica en defensa de la entonces joven institución. “Yo no veo ningún elemento que se haya presentado en ese sentido (privatización)”, finalizó.