VIENA. El resultado del voto presidencial en Austria podría realinear completamente la política austriaca y europea. Los cálculos de ayer hablaban de 50% para Hofer y 50 para Van der Bellen, con un margen de error del 0,7%, e incluyen una estimación del voto por correo, que en esta ocasión marcó un récord con el 14% del censo.
En la primera vuelta electoral, el pasado 24 de abril, esa forma de votar antes de la fecha electoral favoreció claramente al candidato ecologista, aunque solo con un recuento voto a voto de estas papeletas podrá aclarar quién será el próximo Presidente federal de Austria.

 

En caso de ganar el derechista Hofer, sería el primer jefe de Estado de la derecha radical populista en un país de la Unión Europea.

 

La inesperada victoria de Hofer en la primera vuelta fue vista como un rotundo fracaso de los partidos tradicionales, y todo a causa de la manera en que han manejado los problemas más apremiantes del país: el creciente desempleo, los bajos estándares de educación y la crisis de refugiados, entre otros. Como resultado, Werner Faymann estuvo obligado a renunciar como canciller.

 

Su campaña electoral ha girado alrededor del eslogan “los austríacos primero”, centrándose en defender los valores del país alpino frente a lo que asegura son las imposiciones de la UE, la amenaza de los inmigrantes y el peligro que supone el islam.

 

El Partido de la Libertad de Hofer se ha alineado muy de cerca con el partido Frente Nacional de Marine Le Pen, con el Partido para la Libertad de Geert Wilder, así como con grupos de extrema derecha: el AfD alemán y grupos similares en Finlandia y Dinamarca.

 

El candidato ultraderechista dijo que no importa quién gana esta contiende, el nuevo presidente deberá unir a un país dividido.

Van der Bellen, por su parte, se mostró en una primera reacción “moderadamente optimista” de poder ganarle a Hofer y reconoció que la campaña electoral “abrió brechas” en la sociedad.

 

La participación subió en esta segunda y decisiva ronda electoral hasta el 71.9%, frente al 68.5%  en la primera vuelta, ganada el 24 de abril pasado por Hofer con 35.1%, contra 21.3% de Van der Bellen.

 

País polarizado

 

Gane quien gane será un hito: será el primer presidente desde el final de la II Guerra Mundial que no pertenece a ninguno de los dos grandes partidos tradicionales, el socialdemócrata y el conservador.

 

Dos figuras antagónicas

 

Norbert Hofer

 

(45 años, del populista partido liberal FPÖ)

 

Presenta las ideas de la ultraderecha envueltas en una retórica amable y cercana. Su victoria sería inédita porque su partido fue fundado por antiguos miembros austríacos de las SS nazis.

 

Alexander Van der Bellen

 

(72 años, independiente)

 

Antiguo decano de la facultad de Ciencia Económicas de Viena, siempre ha sido muy valorado en Austria por su honestidad y por hablar de forma clara.