La mañana de este miércoles, el dirigente opositor venezolano Leopoldo López, fue trasladado desde la cárcel de Ramo Verde al Hospital Militar para realizar un chequeo médico debido a que sufre una afección en la vista y en los últimos dí­as ha presentado una constante tos.

 

Su abogado, Juan Carlos Gutiérrez, informó que López requiere una evaluación oftalmológica y una revisión de las vías respiratorias.

 

“Es necesario que se evaluado por médicos, ese planteamiento se le hizo a la juez, a las autoridades militares, al ministerio público y a la defensora del pueblo” expresó.

 

El líder opositor, de 44 años, fue condenado en septiembre del año pasado a casi 14 años de cárcel por promover violentas protestas en la capital en febrero de 2014 que dejaron tres muertos y decenas de heridos.