VALENCIA. El Celta logró un importante triunfo en Mestalla por 2-0, que le permite entrar de nuevo en zona europea, tras superar a un Valencia que tuvo el partido en el segunda parte, pero que acabó deprimido y con Mestalla pidiendo al técnico Gary Neville que se vaya.

 

El partido se decantó en los minutos finales, cuando los gallegos marcaron sus dos goles incluso pudieron acabar en goleando, ya que malgastaron hasta tres ocasiones clarísimas para ampliar su renta, lo que hubiera supuesto un castigo excesivo para un Valencia que acabó siendo despedido por su afición con una gran pitada y pañuelos.

 

El Valencia arrancó dominando el partido ante un Celta agazapado en los primeros minutos que pudo complicarse la existencia pronto, tras una salida del meta Sergio que perdió el balón en la frontal y Rodrigo trató de colocar el balón, pero un defensa del conjunto gallego sacó sin grandes problemas el balón ante la desguarnecida portería.

 

Con el paso de los minutos, el Celta comenzó a perderle respeto al Valencia y cada vez fueron más sus aproximaciones al área rival.

 

Se animaron los gallegos y minutos después fue Wass, quien ante la pasividad defensiva local llegó a la frontal del área para sacarse un potente disparo que obligó a Ryan a lucirse de nuevo.

 

En la tramo final, Alcácer marcó, aunque su gol fue anulado por un ajustado fuera de juego, mientras que el Celta tuvo la última en un lanzamiento lejano de Wass que de nuevo topó con el meta australiano del Valencia.

 

En la reanudación, Gary Neville dio entrada a Gayá buscando mayor profundidad en la banda izquierda de su equipo y el Valencia encontró un mayor dinamismo a su juego.

 

No estuvo acertado el Valencia y fue el Celta el que se animó en el tramo final. El primer aviso llego en un mano a mano de Jonny con Ryan, que el portero tocó lo justo con el pie para que el balón de estrellara en el poste.

 

Para colmo, se lesionó Gayá, dejó al Valencia con diez y un par de minutos después Hugo Mallo marcaba el segundo para sentenciar el partido. En los minutos finales, ante un rival descompuesto, el Celta pudo acabar el partido con una goleada a su favor.