Las tareas que realizó en Veracruz la Oficina en México del Alto Comisionado de las Naciones  Unidas para los Derechos Humanos (ONU-DH) se enmarcan dentro de los principios de imparcialidad, independencia y objetividad para recibir información sobre presuntas violaciones a los derechos humanos por parte de las víctimas y sus familiares, expresó dicha oficina.

 

Este domingo los oficiales del Organismo se reunieron en privado con los padres de los cinco jóvenes desaparecidos en Tierra Blanca, Veracruz, para informarles sobre sus derechos y los recursos disponibles que ofrece el sistema internacional de protección de los derechos, confirmó ONU-DH en un comunicado.

 

El lunes y martes se reunieron con el juez interino del Juzgado Primero de Primera Instancia del Distrito Judicial, Óscar Hernández Carmona, que tiene el expediente del caso, en el que consta que hay siete policías estatales consignados, y con el Fiscal del estado, Luis Ángel Bravo Contreras, autoridad encargada de investigar y buscar a los jóvenes, informó a 24 HORAS Bernardo Benítez, papá de uno de los desaparecidos.

 

Los familiares de las víctimas preparan la solicitud de observación para que el Comité de la ONU evalúe el caso y, de hallar irregularidades en la investigación o violaciones a los derechos humanos de las víctimas principales y secundarias, el Organismo emita una Recomendación al Gobierno mexicano.

 

En la misión en Veracruz los representantes del Alto Comisionado mantienen interlocución con las autoridades relevantes, brindándoles cooperación técnica y acercándoles los estándares internacionales.

 

El lunes 11 de enero de 2016 Mario Arturo Orozco Sánchez, de 28 años de edad; su novia Susana, de 16 años de edad; Bernando Benítez Arroniz, de 25 años; su primo José Benítez de la O, de 24 años, y José Alfredo González Díaz, de 25 años, fueron desaparecidos por policías de la Secretaría de Seguridad Pública de Veracruz cuando viajaban en un automóvil con placas de Distrito Federal en la carretera federal de Tierra Blanca.