PARÍS. El presidente de Francia, François Hollande, se plantea prolongar el estado de emergencia de tres meses decretado en el país tras los atentados del 13 de noviembre de 2015 en París, según les confesó hoy a los presidentes de las dos cámaras parlamentarias.

 

Tal y como declaró ante la prensa el presidente de la Asamblea Nacional, Claude Bartolone, el jefe del Estado “ha hablado de forma claramente probable” de prolongar esa medida que permite, entre otras cosas, proceder a registros policiales sin mandato judicial.

 

“Nos ha anunciado que pronto comunicará algo al respecto para permitir al Consejo de Estado y al Parlamento que se pronuncien sobre el texto”, agregó el socialista Bartolone.

 

El presidente de la Asamblea acudió al Elíseo junto a su homólogo del Senado, el conservador Gérard Larcher, para tratar de la reforma constitucional que quiere impulsar Hollande tras los atentados y que incluye la polémica medida de la retirada de la nacionalidad francesa a los terroristas que posean una doble nacionalidad.

 

El actual decreto que mantiene al país en estado de emergencia, adoptado de forma casi unánime en noviembre pasado por ambas cámaras del parlamento francés, expira el próximo 26 de febrero.

 

Prolongarlo, como se plantea Hollande, necesitaría de nuevo de una mayoría clara de diputados y senadores, además de la opinión favorable del Consejo de Estado, la máxima instancia administrativa de Francia.

 

Su prolongación no tiene ahora tanto apoyo político como el que registró tras los atentados, que costaron la vida a 130 personas e hirieron a otras 350.

 

Numerosas organizaciones de derechos humanos reclaman la suspensión de esta medida que permite también ordenar arrestos domiciliarios o prohibir manifestaciones.