Pese a que los líderes parlamentarios se pronunciaron por ejercer un presupuesto austero, la Cámara de Diputados erogará este año 330 millones de pesos más que en 2015.
De acuerdo con el Presupuesto de Egresos de la Federación de 2016, el órgano legislativo cuenta para este año con una bolsa de 7 mil 669.4 millones de pesos, es decir, 3 % más respecto a los 7 mil 339.1 millones de pesos obtenidos en el ejercicio anterior.
En el presupuesto que se aprobaron los diptuados federales consideraron una partida de recursos superior para los empleados del recinto.
La mayor parte del gasto para este 2016 se destinará al rubro de servicios personales, con el fin de cubrir los salarios y prestaciones de seis mil 245 trabajadores, de los cuales dos mil 948 son de base y confianza, 567 son mandos medios, superiores y homólogos y dos mil 730 de honorarios, según el último reporte de la plantilla laboral.
Para cubrir dicho rubro, durante 2015 se ocuparon 3 mil 97.5 millones de pesos (42.2 % del presupuesto), para pagar los salarios anuales de dichos trabajadores, así como la dieta y las partidas por asistencia legislativa y atención ciudadana para los 500 legisladores, por el orden de 890 millones 812 mil 860 pesos.
La partida discrecional
Asimismo, se consideró una partida –incluida en el rubro de transferencias, asignaciones, subsidios y otras ayudas— de poco más de mil millones de pesos, conocida como subvenciones, es decir, apoyos económicos para que los legisladores cumplan con sus tareas parlamentarios.
Dicha bolsa económica, que representa 13.15 % del total de presupuesto de 2015, es libre de comprobación, ya que el apartado carece de reglas, por lo que los legisladores pueden hacer uso de los recursos económicos de manera discrecional, ya que para utilizarlos solo basta la firma del coordinador parlamentario de cada fracción para recibirlos.
Ante la falta de transparencia en el uso de recursos públicos, el titular de la Auditoria Superior de la Federación (ASF), Juan Manuel Portal Martínez, refirió que se trata de una “isla de opacidad”.
Portal Martínez explicó en su último reporte público que hubo una serie de irregularidades “graves”, ya que ante la entrega de estos recursos económicos, “los diputados omitieron presentar algún comprobante que justificara su uso”.