El incremento en la cotización del dólar frente al peso tiene un gran ganador en los receptores de remesas familiares del país, pues el valor en moneda nacional de este indicador en noviembre del año pasado creció 30.1% respecto del mismo mes de 2014.

 

La diferencia se debe principalmente a que el tipo de cambio promedio en noviembre de 2014 se ubicó en 13.59 pesos por dólar, mientras que el año pasado se cotizó en 16.63 pesos, según datos de Scotiabank.

 

En este comparativo, datos del Banco de México (Banxico) mostraron que el crecimiento en dólares fue de 6.3%, pues en noviembre de 2015, las familias mexicanas recibieron mil 880 millones y permitió que en la comparación interanual se acumularan 10 meses en crecimiento.

 

La constancia en los aumentos se debe a la solidez en el sector de la construcción, así como en el incremento en el número de trabajadores de origen latino, como consecuencia de la recuperación en la migración de mexicanos a Estados Unidos a niveles que no se reportaban previos a la crisis económica de 2009.

 

De acuerdo con BBVA Bancomer, al cierre del primer semestre de 2015, en Estados Unidos radicaban 12.2 millones de mexicanos, cifra superior a la reportada en 2008, cuando se estimó una población de 11.8 millones.

 

Para Jorge Gordillo, director de análisis económico de CI Banco, si la tendencia de generación de empleo en Estados Unidos sigue en niveles positivos, el dinero proveniente de mexicanos en el extranjero seguirá su ruta de crecimiento.

 

En los primeros 11 meses de 2015, el saldo acumulado de las remesas alcanzó 22 mil 576 millones de dólares, el mayor monto desde 2008, cuando se obtuvieron más de 23 mil 300 millones.

 

Infografía: Xavier Rodríguez