La Comisión de Puntos Constitucionales de la Cámara de Diputados presentará y en su caso aprobará la minuta de Reforma Política del Distrito Federal, con el objetivo de convertir a la capital en un estado, con autonomía de gobierno y gestión.

 

De acuerdo con Jesús Zambrano, presidente de la Mesa Directiva de la Cámara de Diputados, existen condiciones para que antes de que concluya el actual periodo de sesiones, es decir, el 15 de diciembre, se discuta y apruebe dicho documento.

 

En una entrevista con 24 HORAS, planteó que hay voluntad del gobierno federal, así como de todas las fuerzas representadas en el Poder Legislativo, para respaldar la iniciativa de reforma de Ley que fue impulsada por el jefe de Gobierno capitalino, Miguel Ángel Mancera, desde agosto de 2013, aunque los intentos por provienen de muchos años atrás.

 

El legislador federal del PRD afirmó que el desahogo de la minuta de Reforma Política enviada el pasado 28 de abril por el Senado de la República a la Cámara de Diputados, forma parte de los recientes acuerdos establecidos con esa soberanía, y es uno de los principales temas pendientes de la agenda del Congreso de la Unión en el marco de las reformas constitucionales pactadas en 2013, por lo que se espera que esta misma semana se emita un dictamen.

 

Enfatizó la importancia de darle curso antes de que finalice el actual periodo ordinario de sesiones para dar margen a que las autoridades locales hagan lo correspondiente respecto a la conformación de la Asamblea Constituyente, la cual definirá la primera Constitución de la Ciudad de México.

 

“Será necesario tener una Asamblea Constituyente, que será integrada en proporción mayoritaria mediante el voto el primer domingo de junio de 2016 y se instalará el 15 de septiembre del mismo año. La Ciudad de México deberá tener su primera Constitución Política a más tardar el 31 de enero de 2017”, detalló en lo que respecta a los plazos.

 

Insistió que modificar el estatus de la Ciudad de México implica reconocer que todas las entidades que forman parte del pacto federal tienen los mismos derechos políticos.

 

Qué propone el documento

 

Como parte de la reforma se propone

 

El Distrito Federal cambia de nombre a Ciudad de México y se mantiene como capital del país.

 

Se elimina la figura jurídica de “delegaciones políticas” y se crean las “demarcaciones territoriales” que serán encabezadas por un alcalde y contarán con un cabildo.

 

Desaparece la Asamblea Legislativa del Distrito Federal para dar paso a un Congreso local, con facultades de aprobar o rechazar reformas constitucionales, como ocurre actualmente con el resto de los estados.

 

Los salarios no podrán ser inferiores al mínimo para los trabajadores en general respecto a las entidades federativas.

 

La Ciudad de México estará obligada a vigilar los recursos federales que se ejerzan o administran en las demarcaciones territoriales.

 

El gobierno federal mantendrá la responsabilidad del financiamiento a la educación y a los servicios de salud.

 

Los nombramientos del procurador general de Justicia y del titular de la Secretaría de Seguridad Pública serán hechos por el jefe de Gobierno y no por el Ejecutivo federal, como ocurre actualmente.