San Talavera, el arquero de Toluca salvó a los rojos de partir al partido de vuelta con una desventaja; detuvo un penalti a Juniho y provocó que el duelo de ida de las semifinales entre Tigres y Diablos terminara con un insípido empate a cero, que favorece, en caso de empate en el global a cero, a los del Estado de México, aunque un empate con goles en la vuelta calificaría a los felinos a la gran final del Apertura 2015.

 

Tigres fue mejor, sí, pero mantuvo esa propuesta tímida a la hora de ir al frente, quizá demasiado para un equipo que en el frente cuenta con hombres del calibre de Gignac y Sobis, sin descontar nombres como los de Damm o Aquino por las bandas.

 

Pero Ricardo Ferretti no cambia, ni cambiará, al timonel brasileño le gusta el orden militar; nadie se sale de su lugar, y si bien los felinos tuvieron las mejores oportunidades, la gran noche del arquero rojo impidió que las huestes de José Saturnino Cardozo partieran con desventaja a la Bombonera.

 

Lo peor para los de Ferretti llegó al final del primer tiempo, cuando Talavera adivinó la trayectoria en el disparo de Juniho que detuvo Talavera; pero antes, al minuto 27 Gignac ya había mandado un balón al travesaño, perdiéndose la primera oportunidad para los de casa.

 

Toluca tuvo su tiempo de reacción hasta pasados los 60 minutos, pero la puntería de Enrique Triveiro tampoco estuvo fina, aunque hay que reconocer que el cancerbero local, Nahuel Guzmán colaboró para mantener el cero.

 

La vuelta de las semifinales se jugará el próximo domingo en punto de las 18:00 horas en la cada del diablo, para arrojar al segundo finalista del certamen.