SUIZA. El COI considera “una muy buena noticia” una carta que le ha remitido hoy el secretario de Educación Pública mexicano, Aurelio Nuño, ya que abre una vía de solución al conflicto entre el Gobierno del país y las federaciones deportivas, disputa que por el momento “no es tan grave” como para poner en peligro la participación de México en los Juegos de Río.

 

 

Así se lo comentó este miércoles a Efe en Lausana (Suiza) el director adjunto del Comité Olímpico Internacional (COI) para relaciones con el Movimiento Olímpico, el español Pere Miró, que confía en que el presidente del Comité Mexicano (COM), Carlos Padilla, sea el encargado de acercar las posturas entre las partes.

 

El COI ha advertido al Comité Nacional de Cultura Física y Deporte (Conade), al apreciar signos de injerencia gubernamental en el funcionamiento interno de las federaciones deportivas, lo que podría derivar en sanciones. El presidente del organismo público, Alfredo Castillo, sostiene por su parte que algunas federaciones no han justificado y han hecho mal uso de las subvenciones que les concede el Gobierno.

 

“Nosotros nunca defenderemos a una federación que no cumple o que no justifica sus gastos. No se trata de encubrir a nadie”, afirmó Miró.

 

“Si el Gobierno ha dado a las federaciones un dinero, el ministerio está en su derecho de exigir que ese dinero sea justificado. Y si tiene dudas, también está en su derecho de cerrar el grifo de las ayudas y, si llega el caso, de ir a los juzgados. Pero lo que no se puede”, añadió, “es confundir esto con el derecho a manejar las federaciones como si el Gobierno fuera el propietario”.

 

El Gobierno puede y debe pedir que se justifiquen los gastos, pero no cambiar el funcionamiento interno de una federación”, insistió Pere Miró.

 

El dirigente del COI admitió que esta diferencia “puede ser difícil de entender”, pero consideró que “en cuanto se aclare”, el problema de México debe quedar solucionado.

 

“La carta recibida hoy supone un punto de mejora, por cuanto el secretario de Educación, que está por encima de Conade, se muestra de acuerdo con nuestro punto de vista. Está muy contento de ver, por un lado, que nosotros creemos que el dinero hay que justificarlo y, por otro, que las federaciones deben tener autonomía en su funcionamiento”.

 

El siguiente paso, dijo Miró, será establecer con el ministerio “una serie de contactos para avanzar en la solución del problema”.

 

“Nos gustaría que Carlos Padilla, presidente del COM y que no está cuestionado, fuera quien aclarase las cosas e hiciera de puente entre las dos partes. Sería fantástico que el COM pudiera hacer ese papel”, destacó.

 

Preguntado por si estaba en peligro la participación de los deportistas mexicanos en los Juegos Olímpicos de Río de Janeiro, que se disputarán el próximo agosto de 2016, Pere Miró aseguró: “De momento, no. Nosotros nunca hemos dicho eso. No le vemos tanta gravedad al asunto”.

 

En los antecedentes en los que un comité olímpico nacional ha sido suspendido por el COI por injerencia de su gobierno se ha dado del caso de que sus deportistas han participado en las competiciones internacionales bajo la bandera olímpica, en lugar de la de su propio país.

 

La semana próxima, del 8 al 10 de diciembre, la Comisión Ejecutiva del COI celebrará una reunión en Lausana en la que Pere Miró presentará un informe sobre la situación de México, por si el ejecutivo del organismo olímpico considera oportuno tomar alguna medida.