BERLÍN. La suspensión del amistoso del pasado martes entre Alemania y Holanda, en Hannover, evitó un “ataque terrorista minuciosamente planeado”, según fuentes de la inteligencia alemana citadas por la prensa alemana.

 

La célula yihadista que pergeñó este atentado frustrado -y que se iba a cometer apenas cuatro días después de la masacre de París, en la que murieron 130 personas- sigue y podría perpetrar ataques, agrega el rotativo alemán.

 

El plan era detonar tres bombas dentro del estadio IDH Arena mientras se celebraba el partido amistoso entre Alemania y Holanda, otra en una parada de autobús y una última en una estación de tren, según informaron los servicios secretos franceses a sus homólogos alemanes.

 

La información aportada incluye las identidades de los sospechosos, hasta ahora fuera del radar del personal de Inteligencia de Alemania, que ha elevado la vigilancia a los considerados islamistas peligrosos con el objetivo de dar con los sospechosos.

 

Las fuerzas de seguridad, que desplegaron un fuerte operativo en Hannover con motivo del partido, no encontraron explosivos -pese a varias falsas alarmas- ni practicaron ninguna detención.