La Comisión Nacional de Derechos Humanos (CNDH) rechaza la pena de muerte y se opone a su aplicación.

 

En el marco del Día Mundial contra la Pena de Muerte, la CNDH  dijo que la aplicación de la pena de muerte no es el camino para frenar la criminalidad.

 

“Para esta Comisión, el derecho de la vida es elemental, conditio sine qua non para el goce de los demás derechos y fundamento de los ordenamientos constitucionales que lo reconocen y amparan como valor esencial e interés social supremo, por lo cual las naciones tienen la obligación de velar por su protección total”, indicó a través de un comunicado.

 

Reiteró que el derecho a la vida permite el acceso a los demás derechos de las personas, por lo que la pena de muerte debe ser erradicada.

 

“La CNDH considera que la pena de muerte es intolerable y de imposible reparación, cuya aplicación conlleva serias violaciones a los derechos humanos de las personas, además de que está demostrada su ineficacia en la disminución de los índices delictivos en países que la practican. Por ello, este Organismo Nacional, en el ámbito de sus atribuciones constitucionales, enfatiza su compromiso para continuar los esfuerzos tendentes a la abolición en el mundo de dicha práctica”, señaló.