WASHINGTON. El papa Francisco pidió hoy en el Congreso de Estados Unidos “no dar nunca la espalda a los vecinos”, en alusión a los millones de inmigrantes cuyos derechos -dijo- “no siempre fueron respetados”.

 

Les hablo como hijo de inmigrantes“, recordó el pontífice, quien aludió a los extranjeros que en tiempos pasados, “bastantes convulsos y sangrientos”, llegaron a lo que hoy es Estados Unidos, pero afirmó: “es difícil enjuiciar el pasado con los criterios del presente”.

 

Por otra parte, advirtió que en cuanto a los conflictos armados en el mundo “debemos preguntarnos porqué se venden tantas armas a quienes producen tanto sufrimiento a los individuos y a la sociedad, la respuesta es dinero, dinero bañado en la sangre de los inocentes, lo que lo permite es un silencio culposo, debemos enfrentarnos a este problema para poner un alto a la venta de las armas”.

 

El Santo Pontífice también señaló que no tiene duda que tanto que Estados Unidos y su Congreso representan un papel muy importante en la lucha contra el cambio climático, con estrategias y una cultura para proteger a la naturaleza, “debemos pensar en un mundo humano integrado y social, confío en que las grandes organizaciones de investigaciones y estudios de la Unión Americana pueden formar parte de esto”.

 

“Siempre pediré por la abolición de la pena de muerte […] quiero animar a todo el que esté convencido de que es un castigo justo y necesario jamás debe excluir la esperanza y la meta de la rehabilitación”

 

“Ninguna religión es inmune a diversas formas de aberración individual o de extremismo ideológico” señaló durante su discurso.

 

“Combatir la violencia perpetrada bajo el nombre de una religión, una ideología, o un sistema económico y, al mismo tiempo, proteger la libertad de las religiones, de las ideas, de las personas requiere un delicado equilibrio en el que tenemos que trabajar”, agregó.

 

Llega al Capitolio

 

El papa Francisco llegó este jueves al Capitolio de Washington, donde pronunciará un histórico discurso ante el Congreso reunido en sesión conjunta, el primero de un pontífice ante los representantes elegidos por el pueblo estadunidense.

 

El pontífice llegó poco antes de las 09:30 hora local (13:30 GMT) y se dirigió al despacho del presidente de la Cámara de Representantes, el republicano John Boehner.

 

Desde las primeras horas de la mañana, miles de personas esperan la llegada del Papa en la explanada situada delante del Capitolio donde las bendecirá desde el balcón del edificio que aloja las cámaras del Congreso de Estados Unidos.

 

Jorge Mario Bergoglio tiene previsto comenzar a pronunciar su discurso, en inglés, a las 10:00 hora local (14:00 GMT) y después se trasladará a la Sala de las Estatuas, donde está la estatua del nuevo santo de la Iglesia católica, el fraile español Junípero Serra, que el papa canonizó el miércoles.

 

A la sesión conjunta del Congreso asisten además diversas autoridades, como los responsables del Tribunal Supremo, los presidentes del Senado y de la Cámara de Representantes, el Secretario de Estado y el decano del Cuerpo Diplomático.

 

Se trata del primer acto del papa en el tercer día de su visita a Estados Unidos, a donde llegó el pasado martes procedente de Cuba.

 

Hoy mismo el pontífice se trasladará a Nueva York, donde el viernes intervendrá ante la Asamblea General de Naciones Unidas, y el sábado viajará a la ciudad de Filadelfia, la última etapa de su décimo viaje internacional.

 

Expectación por histórico discurso

 

Con gran expectación se espera el histórico discurso que pronunciará hoy el papa Francisco ante la sesión conjunta de las dos Cámaras del Congreso de Estados Unidos en el Capitolio.

 

Por primera vez un Papa tomará la palabra ante el parlamento estadunidense. Se trata de la actividad más importante que tendrá Jorge Mario Bergoglio este jueves en Washington, antes de partir con destino a Nueva York.

 

Tras un breve encuentro privado con el presidente de la Cámara de Representantes, John Boehner, este lo acompañará hasta el Hemiciclo donde se anunciará su ingreso. Boehner y el vicepresidente, Joe Biden, darán inicio a la sesión conjunta leyendo los nombres de los dignatarios presentes.

 

Entonces Bergoglio será acompañado ante un podio en el cual estarán dispuestos el propio Boehner, el presidente del Senado, el vicepresidente, Joe Biden; el secretario de Estado, John Kerry; el jefe de la oposición y los jueces de la Suprema Corte de Justicia.

 

Terminado el discurso, el obispo de Roma será acompañado a la Sala de las Estatuas y después a la Sala de la Cúpula, donde ofrecerá como regalo a la Biblioteca del Congreso un edición preciosa y antigua de la Biblia.

 

Luego Bergoglio y Boehner se asomarán a un balcón para saludar y bendecir a la multitud reunida en el área monumental del National Mall. De allí el líder católico se despedirá y será trasladado a la Iglesia de San Patricio.

 

Allí cumplirá una visita al centro caritativo local y se reunirá con un grupo de sin techo antes de despedirse de Washington para viajar a Nueva York, donde está previsto que aterrice en torno a las 17:00 horas (21:00 GMT).

 

En helicóptero se moverá hasta la catedral de San Patricio en Manhattan para presidir la oración de las vísperas con el clero y religiosos de la arquidiócesis local. Esa será su ultimo acto público de este día.  DM