El crecimiento en la demanda global de productos orgánicos, de alrededor de 20% cada año, representa una oportunidad que México busca aprovechar. Tan sólo de 1996 a la fecha, la superficie sembrada de productos orgánicos en el país creció 24 veces y el ingreso de divisas 17 veces.

 

De acuerdo con información de la Secretaría de Agricultura, Ganadería, Desarrollo Rural, Pesca y Alimentación (Sagarpa), el área de cultivo pasó de 21 mil 265 hectáreas a 512 mil 246 en ese lapso, mientras que las divisas pasaron de 34.2 millones de dólares a 600 millones de dólares anuales por la exportación de estos productos.

 

Para impulsar la comercialización de productos orgánicos en mercados internacionales, el Consejo Nacional de Producción Orgánica (CNPO) trabaja en la regulación, actualización de las reglas de operación, estructura programática y en la gestión de equivalencias para la certificación con los principales compradores en el mundo.

 

En un comunicado, el titular de la Sagarpa, Enrique Martínez y Martínez, destacó los avances para impulsar la apertura y consolidación de mercados internacionales para los productos agroalimentarios mexicanos.

 

Al concluir las labores bianuales el “Consejo Nacional de Producción Orgánica 2013-2015”, el subsecretario de Alimentación y Competitividad de la Sagarpa, Ricardo Aguilar Castillo, declaró formalmente instalado los trabajos del CNPO para los próximos dos años, con la ratificación de sus integrantes.

 

A dos años de su creación, en su calidad de presidente suplente del organismo, Aguilar Castillo destacó el impulso que se ha dado a la producción orgánica, pues actualmente en 22 estados de la República se producen más de mil productos orgánicos.

 

En este periodo, dijo, el Consejo instituido por la Sagarpa ha publicado los lineamientos para la operación orgánica de la actividad agropecuaria y el Acuerdo por el que se da a conocer el distintivo nacional de los productos orgánicos, con lo que hoy México cuenta con un marco regulatorio moderno en la materia.

 

Resalta que se incluyó en las reglas de operación de la dependencia los mecanismos para el apoyo a la capacitación y la certificación de orgánicos, lo que permitió acelerar estos trabajos.