MOSCÚ. El líder checheno, Ramzán Kadírov, criticó hoy la condena a muerte del autor de los atentados del maratón de Boston (2013), Dzhokhar Tsarnaev, nacido en la república rusa de Chechenia.

 

“¿Quién da garantías de que, una vez condenado a muerte Tsarnáev, mañana no se descubra su inocencia? Eso pasa a menudo en Estados Unidos. Llegó a EU con nueve años. Y la América en la que él creía lo convirtió en terrorista”, escribió Kadírov en Instagram.

 

El líder de la República de Chechenia dijo no creer que Tsarnáev “hubiera cometido ese atentado sin el conocimiento de los servicios secretos de Estados Unidos”.

 

“Los servicios secretos que le acusaron de implicación en la tragedia de Boston necesitaban una víctima. Y la víctima fue Tsarnáev”, apuntó.

 

El líder chechén dijo estar a favor de la lucha contra el terrorismo y de neutralizar a los terroristas, pero recordó que el hermano del condenado, Tamerlán, fue tiroteado por la policía estadounidense “en extrañas circunstancias”.

 

“Los hermanos Tsarnáev llegaron a EU a una corta edad. Fueron buenos estudiantes, hicieron deporte, compusieron música, el mayor se casó y tenía un hijo. Un biografía ideal para un candidato a gobernador”, señaló.

 

Entonces, se preguntó: “¿Quién hizo de ellos unos terroristas? ¿Quién les enseñó a preparar bombas, planificar un atentado y evitar la filtración de información? ¿Quién de manera tan obstinada no quería enterarse de los preparativos (del atentado)?”.

 

Cuando fueron detenidos hace dos años, Kadírov ya insistió en que los hermanos Tsarnáev había crecido y se habían formado en Estados Unidos, no en Chechenia.

 

“La raíz del mal hay que buscarla” en ese país, dijo Kadírov entonces.

 

Tsarnáev, coautor confeso de los atentados de la maratón de Boston, fue condenado esta semana a muerte por haber asesinado a tres personas y herido a otras 264 en el maratón de Boston, según el veredicto.

 

La decisión sobre este ataque -el peor en suelo estadunidense desde los atentados terroristas del 11 de septiembre de 2001- no pone fin al proceso pues la defensa dijo que recurriría la condena, de manera que la espera de Tsarnáev en el corredor de la muerte podría prolongarse durante décadas.