Jalisco es una de las entidades con mayor fuerza policial en el país, pese a ello es la segunda entidad de la región occidente con la más alta incidencia delictiva. En comparación con los estados donde actualmente el gobierno federal mantiene estrategias, la entidad sólo es superada por el Estado de México con un mayor número de policías.

 

Con una plantilla de 18 mil 231 elementos policiacos, la entidad gobernada por Aristóteles Sandoval Díaz, cuenta con más efectivos a nivel estatal y municipal a diferencia de los casos de Michoacán, Tamaulipas y Guerrero, donde la actual administración realizó despliegues de fuerzas del orden en regiones específicas.

 

En contraste, el estado perteneciente a la Región Occidente del país, además de ser el que cuenta con mayor fuerza policiaca se coloca en el segundo lugar con más delitos sólo por debajo de Guanajuato, pues la última actualización del Secretariado Ejecutivo del Sistema Nacional de Seguridad Pública (SESNSP) Jalisco se posiciona con 6 mil 787 delitos, registrados sólo en febrero de este año, por debajo de los 7 mil 469 ilícitos que registró Guanajuato.

 

De acuerdo con el balance del mapa delictivo por regiones del país en los últimos dos años, la región occidente se ubicó como la segunda más violenta del país, siendo los estados de la zona centro donde más crímenes de alto impacto y víctimas se registran anualmente.

 

Pese a contar con un mayor estado de fuerza de policías, en 2014 Jalisco y Guanajuato, ambos de la misma región, se ubicaron dentro de las cinco entidades más violentas y con más incidencia delictiva a nivel nacional, dentro de los cuales también figuró Baja California, el Estado de México y el Distrito Federal.

 

Se queda en el estado

 

Aunque los embates del crimen organizado contra los policías en Jalisco han aumentado, y ante la advertencia que hiciera el fiscal general, Luis Carlos Nájera Gutiérrez de Velasco, sobre que toda la fuerza del estado irá sobre los asesinos de los 15 agentes de la Fuerza Única Regional, la estrategia para abatir este fenómeno no acudirá por apoyo de la Federación.

 

Luego de consultar con fuentes federales, este diario confirmó que hasta el momento no hay petición expresa por parte de las autoridades estatales para la implementación de una estrategia conjunta o un engrose en las filas de los efectivos en el estado, debido que las investigaciones y trabajos se mantienen en un nivel local.

 

“No hay una instrucción al momento de algún despliegue o apoyo extraordinario”, señalaron fuentes consultadas, en concordancia con lo dicho por el comisionado de Seguridad Pública del estado, Alejandro Solorio Aréchiga, quien al día siguiente de la emboscada contra los uniformados descartó la activación del código rojo en la entidad ante el actuar del crimen organizado.

 

Ayer, en entrevista con Radio Fórmula, el fiscal Gutiérrez de Velasco no descartó que los ataques en contra de las fuerzas del orden continúen, sin embargo reviró que tampoco decaerán los esfuerzos y “la batalla” en contra de los criminales. “Este es un tema de malos contra buenos, es un tema en el que la delincuencia ha estado atacando a la autoridad”.