Ahora sí, con la mayoría de las candidaturas del Distrito Federal en sus manos, será Miguel Ángel Mancera quien dé la batalla por la Ciudad de México en nombre del PRD el próximo 7 de junio.
El adversario a vencer: Andrés Manuel López Obrador y sus morenos.
Así quedó definido el juego este fin de semana en el Consejo Estatal Perredista, luego de que Héctor Serrano –líder de la corriente mancerista Vanguardia Progresista, destronara y humillara al otrora factótum del DF, René Bejarano, líder de Izquierda Democrática Nacional (IDN).
Porque fue Serrano el gran operador de lo que aconteció. Claro, con el apoyo de Los Chuchos de Nueva Izquierda y sus aliados de Foro Nuevo Sol y Alternativa Democrática Nacional (ADN).
Pero de que el secretario de Gobierno del DF hizo de las suyas bien y bonito, ¡ni quién lo dude!
Basta ver el resultado: Los bejaranos sólo obtuvieron posiciones para tres delegaciones: Azcapotzalco, Álvaro Obregón y Benito Juárez (con pocas posibilidades de triunfo) y seis distritos locales (tres sin mayores posibilidades de triunfo).
Los Chuchos se quedaron con 19 candidaturas: seis jefaturas delegacionales –Gustavo A. Madero, Iztacalco, Milpa Alta, Venustiano Carranza, Cuajimalpa, Coyoacán– y 13 diputaciones.
Los manceristas se llevaron 13 posiciones: tres delegaciones –Cuauhtémoc, Iztapalapa, Magdalena Contreras– y 10 distritos.
Los amalios se quedaron con Miguel Hidalgo y Tláhuac, y los mexiquenses de Bautista con Xochimilco.
Lo más importante empero del triunfo de Serrano y Vanguardia Progresista es que entregaron a Mancera el poder del PRD capitalino.
Y con ello la responsabilidad de “defender” la ciudad que gobierna bajo las siglas del Partido de la Revolución Democrática.
Por ello la lucha encarnizada por la capital del país se dará entre Mancera y López Obrador.
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MARÍA ROJO Y LA CAÍDA DE BEJARANO.- Apenas comenzaba la noche y René Bejarano veía cómo se derrumbaba su fuerza.
En un santiamén, Alejandro Fernández (jefe delegacional con licencia en Cuauhtémoc) y el diputado José Luis Muñoz Soria abandonaban las filas bejaranistas para sumarse a la corriente mancerista manejada por Héctor Serrano.
La ruptura con algunos de los dirigentes de la Cuauhtémoc se debió a la precandidatura impulsada a favor de la actriz María Rojo. Y a partir de ahí operaron desde el GDF:
Según contó Bejarano, el secretario de Gobierno del DF le garantizó una candidatura a Muñoz Soria a cambio de que renunciara a IDN; y el propio Mancera habló con María Rojo para pedirle que renunciara a la precandidatura por la Cuauhtémoc y aceptara una diputación plurinominal.
El caso es que comenzó la deserción de las filas bejaranistas. Y para cuando amaneció, en conferencia de prensa, el profesor normalista acusaría el golpe con esta conclusión:
“Es evidente que el jefe de Gobierno ha sido el peor gobernante de la Ciudad desde la época en que el ingeniero (Cuauhtémoc Cárdenas) asumió el poder”.
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SIGUEN DE MEDROSOS CON EL PVEM.- El Instituto Nacional Electoral ordenó ayer suspender los promocionales de los senadores Carlos Puente y Ninfa Salinas donde promueven los vales de medicinas del Partido Verde Ecologista de México (PVEM).
Ya era hora. Pero otros casos quedaron bajo el tapete. Por ejemplo, la Comisión de Quejas del INE resolvió NO decretar medidas cautelares respecto a la propaganda “genérica” del Verde donde aparecen actores y conductores de Televisa y las campañas “el que contamine pague” y “cadena perpetua a secuestradores”.
Ni sobre los llamados “cineminutos”.
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GEMAS: Obsequio de la escritora Elena Poniatowska al recibir el Premio PEN México: “Si ya permitimos lo que les pasó a los que ya se fueron, ¿cuándo vamos a empezar a pelear por los que vendrán?”
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