Harvest (8)

 

RIQUEWIHR, Francia. Región emblemática de la gastronomía francesa, Alsacia es símbolo de una vitivinicultura con carácter, con identidad, con una historia que trasciende el pasado y se desenvuelve de manera dinámica en los andares de la modernidad. Suelo, paisaje, clima, vivencias colectivas e individuales, transiciones de nacionalidad y una voluntad sólida para conformar una industria competitiva a nivel mundial, sin perder su perfil artesanal, distinguen a esta tierra de paisajes idílicos y mesas cotidianas que siempre invitan al goce.

 

Riquewihr, pueblo arquetípico de Alsacia, con sus callejuelas, sus torreones, su espectacular campanario desde el cual se domina un escenario brillante marcado por viñedos, es hogar ancestral de importantísimas bodegas, como es el caso de Hugel, fundada en 1639. La familia Hugel pertenece a la Premium Familiae Vinum, una asociación que reúne a algunas de las dinastías más prestigiadas del mundo vitivinícola, promoviendo además los valores de los productores de vino familiares.

 

“Hugel sigue siendo una empresa 100% familiar: la propiedad y la dirección recae sobre la 12ª generación. Somos propietarios de 30 hectáreas de pago de excelente calidad, la mayoría clasificado como Grand Cru. También adquirimos uvas de otras100 hectáreas cultivadas sobre contrato. En los viñedos de Hugel solo se han plantado variedades nobles de uvas alsacianas, con viñas que tienen una media de edad de 35 años”, refiere Etienne Hugel, uno de los herederos de la firma y quien junto con Jean-Philippe y Marc Hugel tiene actualmente la responsabilidad de la firma.

 

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