Alfredo Castillo Cervantes, comisionado para la Seguridad y el Desarrollo de Michoacán , conformó la muerte de dos integrantes de Los Caballeros Templarios, uno de los cuales fue identificado como José Julio Mendoza Román, el jefe de sicarios de Servando Gómez, La Tuta.

 

Mendoza Román, quien era conocido como El Niño o El Parotas, se encargaba de extorsionar a empresarios y dueños de minas del puerto de Lázaro Cárdenas.

 

El Parotas era buscado por el gobierno federal desde que fuera rescatado en 2004 del panel de Apatzingán por un comando armado.

 

Hugo Emilio Corona Cabrera, el otro abatido, también estaba a las órdenes de La Tuta.

 

Castillo Cervantes informó que el operativo, realizado en un paraje conocido como Panzacola, participaron elementos de la Secretaría de Seguridad Pública y de la Secretaría de Marina.

 

GH