La situación se ha agravado en el país por la desaparición de 43 normalistas de Ayotzinapa, por lo que es complejo sumar un pacto para blindar elecciones con las fuerzas políticas y el gobierno federal, coincidieron las dirigencias nacionales del PAN y PRD.

 

Ante la quema de instalaciones partidistas y de gobierno por el repudio en el caso Iguala, el presidente de Acción Nacional (PAN), Ricardo Anaya, reconoció que el país vive una severa crisis política y de seguridad que no ha permitido un gran acuerdo de blindaje electoral para evitar infiltraciones del crimen organizado en los comicios de 2015.

 

“Nosotros no identificamos resistencias, lo que ha ocurrido es que la situación en el país se ha agravado de manera muy importante desde el primer anuncio que hicimos (sobre el blindaje). Hoy la complejidad es mucho mayor de la que existía en ese momento”, aseveró.

 

Adelantó que ningún acuerdo va a liberar a los partidos políticos de la responsabilidad de hacerse cargo de la trayectoria profesional y personal de quienes postulemos a cargos de elección popular, por lo que anunció medidas de revisión severas para aquellos panistas que se lancen por una candidatura como revisión patrimonial, nexos y pasado político.

 

En conferencia de prensa el dirigente panista llamó a la ciudadanía a la prudencia y a que se manifieste de manera pacífica

 

Sin embargo, dejó en claro que la Procuraduría General de la República (PGR) no da certeza ni pruebas contundentes sobre el caso Iguala y la desaparición de los 43 estudiantes de la Normal Rural Isidro Burgos, de Ayotzinapa.

 

Asimismo, la dirigencia nacional del PRD coincidió con los panistas en que el acuerdo sigue congelado por lo que el sol azteca ha decidido ir solo en la búsqueda de blindar a sus candidatos para el proceso electoral 2015.

 

Cuestionada por 24 HORAS al respecto, Amalia García, secretaria de difusión y prensa del sol azteca, detalló que el Comité Ejecutivo Nacional de su partido ha resuelto “avanzar en su propio camino” para poner reglas y establecer un código de ética y una vigilancia rigurosa para los perredistas que se lancen como candidatos en la elección de junio del próximo año.

 

“Si lo otros (partidos) fueran, también sería lo pertinente. Pero nosotros no podemos esperarnos a que los otros partidos avancen, nosotros hemos tomado la determinación de avanzar”, recalcó.