DALLAS. La segunda enfermera que dio positivo por el virus de Ébola tras atender al enfermo fallecido en el hospital de Texas viajó el lunes en un vuelo de Cleveland (Ohio) a Dallas (Texas), un día antes de acudir al hospital con fiebre. Las autoridades temen posibles nuevos contagios y han pedido a los 132 pasajeros del vuelo de Frontier Airlines que contacten con el Centro de Control y Prevención de Enfermedades de Estados Unidos (CDC).

 

 

 

La enfermera será trasladada al hospital Emory de Atlanta, donde ya fueron atendidos con éxito dos personas con el virus, informó el director del CDC, Thomas Frieden.

 

 

“El segundo trabajador sanitario es el individuo que está siendo trasladado de Dallas a Emory (Atlanta) y seguimos evaluando cualquiera que tenga síntomas”, dijo Frieden en conferencia de prensa.

 

 

Amber Joy Vinson, de 29 años, fue internada en la noche del martes en el Hospital Presbiteriano de Dallas después de haber registrado una ligera fiebre. Frieden aseguró que es “muy bajo” el riesgo de contagio a otros pasajeros de este vuelo, el 1143 de Frontier Airlines, realizado este lunes desde Cleveland a Dallas/Fort Worth. A pesar de ello, el responsable de los CDC dijo que se preparan para posibles nuevos casos de ébola en el país en los próximos días.

 

 

De acuerdo con el New York Times, el avión se encuentra ya fuera de servicio y se está procediendo a su limpieza. Por su parte, el Departamento de Salud de Ohio rastrea los contactos que mantuvo Vinson.

 

 

Según Frieden, la infectada había estado controlando sus síntomas, pero no llegó a reportar el hecho de que su temperatura corporal había subido ligeramente hasta alcanzar los 37.5ºC antes de que saliera para Dallas. Por esta causa “no se le debería haber permitido” viajar en una aerolínea comercial y adelantó que en el futuro las personas que estén siendo vigiladas debido a un posible contagio de ébola no podrán tomar vuelos comerciales.

 

 

La enfermera se encuentra ingresada en el Hospital Presbiteriano de Dallas, donde fue atendida la primera víctima de ébola en Estados Unidos, el liberiano Thomas Eric Duncan, y está ingresada la trabajadora sanitaria Nina Pham, el primer caso de contagio en el país.

 

El Hospital Universitario de Emory es uno de los cuatro hospitales en todo el país que cuentan con una sala aislada especializada para tratar enfermedades altamente contagiosas.

 
En el hospital Emory, situado a escasos metros de la sede de los CDC en atlanta, fueron tratados el doctor Kent Brantly y la enfermera Nancy Writebol, que fueron trasladados desde Liberia tras confirmarse que habían sido contagiados por la enfermedad y que recibieron el alta a finales de agosto.
Un tercer paciente, que no ha sido identificado, permanece todavía en Emory bajo tratamiento por ébola desde hace poco más de un mes.

 

El responsable de los CDC aseguró que evitar la propagación de la enfermedad requerirá el esfuerzo de varias entidades y organismos, por lo que están redoblando sus esfuerzos.

 

Según los últimos datos de la OMS, la epidemia ha causado ya cuatro mil 447 muertos y ha infectado a ocho mil 914 personas. Los países más afectados son Liberia, Sierra Leona y Guinea.

 

 Enfermera española demandará a autoridades sanitarias

 

 

MADRID. Teresa Romero, la primera contagiada del virus del Ébola en Europa, conversó con su esposo, Javier Limón, quien, por su parte indicó que piensa emprender acciones legales contra las autoridades sanitarias.

 

Al cumplirse 17 días desde que sintió los primeros síntomas del ébola, Romero se mantiene estable dentro de la gravedad y ya se levanta y toma líquidos, según un familiar, que ha señalado también que la paciente se encuentra “muy animada”.

 

Romero está ingresada en el Hospital Carlos III de Madrid, donde también se encuentra aislado y en observación su marido, como medida de prevención ante la posibilidad de que haya sido contagiado por su esposa.

 

Ambos mantuvieron ayer una conversación telefónica de diez minutos, la primera desde el jueves pasado, según informó la vocera de la pareja, María Teresa Mesa, quien dijo además que la paciente empezó a ingerir líquidos y está “mejor”.

 

Durante la conversación, la enferma preguntó a su marido por el perro de la pareja, Excálibur, que fue sacrificado el pasado día 8 de octubre por orden de las autoridades locales para evitar riesgo de contagio, a lo que este le ha respondido que no se preocupe por el animal.

 

 

El marido de Teresa Romero piensa emprender acciones legales contra la ministra de Sanidad española, Ana Mato, y el consejero de Sanidad del Ejecutivo de la región de Madrid, Javier Rodríguez, a raíz del contagio de su mujer, dijo la vocera de la pareja.