MADRID. Una asistente de enfermería española infectada con el virus del ébola muestra signos de recuperación, pero expertos europeos en enfermedades infecciosas encontraron fallas que necesitan arreglarse en el hospital de Madrid donde se atienden los casos de la enfermedad, informaron autoridades el viernes.

 

La asistente de enfermería Teresa Romero, quien se contagió de ébola en un hospital de Madrid tras estar en contacto con dos misioneros españoles que posteriormente murieron a causa del virus muestra “ligeros signos de mejoría”, informó el gobierno en un comunicado.

 

Pero el comunicado indica que el pronóstico de Romero sigue siendo de gravedad y no se pueden descartar mayores complicaciones.

 

El comunicado indica que un comité del Centro Europeo para la Prevención y Control de Enfermedades que visitó el hospital Carlos III llegó a la conclusión de que sus instalaciones no son adecuadas para atender emergencias como el brote de ébola.

 

Fernando Simón, coordinador de alertas de emergencia del Ministerio de Salud, dijo que hay una señal de optimismo sobre Romero porque la “carga de virus” en su torrente sanguíneo ha disminuido.

 

En conferencia de prensa celebrada en el Palacio de la Moncloa, residencia del presidente del gobierno, Mariano Rajoy, Simón dijo que se reunió con los dos integrantes del comité de enfermedades contagiosas y que éstos le externaron sus preocupaciones.

 

Señaló que se necesita mejorar los compartimentos herméticos que permiten el ingreso y salida del área de cuarentena del hospital.

 

“Los compartimentos herméticos fueron construidos para atender situaciones altamente contagiosas pero no se había previsto que se necesitara hacer grandes transformaciones al equipo para llevar a cabo ciertos procedimientos médicos”, dijo.

 

Indicó que los compartimentos son demasiado estrechos para usar el equipo protector adecuado. Las autoridades españolas sospechan que Romero se contagió al tocarse la cara accidentalmente con un guante cuando se quitaba el equipo protector en un compartimento pequeño.

 

Otra enfermera española que también atendió a un paciente infectado con el virus en África fue dada de alta el sábado después de dar negativo dos veces el examen para ébola.

 

Ese enfermo, Manuel García Viejo, murió de ébola el 25 de septiembre. García Viejo fue director médico de un hospital de Sierra Leona durante 12 años.

 

GH