BUENOS AIRES. El sector más radical de la Central de Trabajadores de Argentina, que agrupa a trabajadores del sector público y organizaciones de izquierda, inició este miércoles una huelga general de 36 horas en demanda de la eliminación de impuestos que se aplican al salario, exigencia de aumentos en las ayudas sociales y la reapertura de negociaciones salariales.

 

La huelga general convocada por las centrales sindicales opositoras fue antecedida hoy por piquetes y marchas, en protesta por la ola de suspensiones y despidos y en reclamo por mejores salarios y cambios en el impuesto a las ganancias que afecta a los trabajadores.

 

Previo al inicio de la huelga general, una protesta se reportó desde primeras horas de la mañana con concentraciones de huelguistas que cortaron los accesos a Buenos Aires y a ciudades cercanas como La Plata, 60 kilómetros al sur, lo que generó numerosos trastornos a los automovilistas que se desplazaban a sus trabajos.

 

Los principales accesos de la capital fueron bloqueados por manifestantes de la fracción disidente de la Central de Trabajadores de Argentina (CTA), el Partido Obrero y otras agrupaciones de izquierda. También se registraron bloqueos en otras ciudades. 

 

La CTA y Asociación de Trabajadores del Estado (ATE) anunciaron además marchas y protestas en la tarde en repudio a las políticas del gobierno de la peronista Cristina Fernández de Kirchner.

 

 

A partir de las 15:00 horas GMT los gremialistas liderados por Pablo Micheli iniciaron un paro de actividades que confluirá hasta el jueves que liderará junto al  camionero Hugo Moyano, representante del sector combativo de la Confederación General del Trabajo.

 

El paro con movilizaciones de la Central se produce en momentos en que se han elevado los despidos y suspensiones de trabajadores en la industria.

 

La economía entró en recesión y la inflación anual alcanza 40 por ciento, según consultoras privadas.

 

“La pérdida del poder adquisitivo, el incremento de la precarización laboral, la falta de respuesta a los reclamos de los trabajadores por parte del gobierno son algunos de los ejes principales del paro”, afirmó en un comunicado el consejo directivo de la Asociación Trabajadores del Estado.

 

Jueves sin futbol por paro

 

Argentina estará sin fútbol el próximo jueves por la adhesión del gremio de los trabajadores de entidades deportivas a la huelga general, anunció la Asociación del Fútbol Argentino (AFA).

 

La AFA informó que debido a la adhesión de la Unión de Trabajadores de Entidades Deportivas y Civiles (UTEDYC) a la convocatoria a la huelga general del próximo jueves, la entidad “reprogramará en las próximas horas los encuentros entre Banfield-Tigre, Vélez Sarsfield-Lanús y Quilmes A.C.-San Lorenzo”.

 

El calendario previsto este miércoles quedó confirmado con los partidos entre Rosario Central y Godoy Cruz así como el de Atlético de Rafaela y Newell’s Old Boys a las 17:00 horas y los encuentros entre River Plate y Defensa y Justicia y Estudiantes y Boca Juniors a las 21.30 horas.

 

La huelga fue convocada por las centrales obreras enfrentadas al Gobierno en protesta por la pérdida de poder adquisitivo de los trabajadores y el aumento de las suspensiones y los despidos. (Con información de EFE y AP)