Además de cambiar radicalmente su imagen, para no ser tachado como un instituto político de tintes religiosos, el Partido Encuentro Social (PES) se deslindó de los ministros de culto que habrían operado y financiado campañas de afiliación partidista.

 

Desde su fundación como un partido local en Baja California, hace 12 años, el PES tomó como logotipo la mitad del símbolo de la cristiandad, que consiste en dos arcos que se intersecan para formar la silueta de un pez.

 

En enero pasado, ya encaminado a convertirse en un partido político nacional (registro avalado hace una semana), el PES tuvo que dar un giro de 360 grados en el diseño del emblema para evitar relacionarlo con alguna religión, además de salir del estigma de que está integrado por ministros de culto, declaró en entrevista con 24 HORAS, el líder del PES, Hugo Eric Flores Cervantes.

 

“Decidimos quitar cualquier asociación religiosa con el objetivo de que no fuéramos estigmatizados”, sostuvo.

 

Además, la dirigencia partidista decidió cambiaron su lema anterior, que decía “Di Sí a la Vida”, para quedar: “Por un México Libre en Justicia, Dignidad e Integridad”.

 

Junto al lema, el logotipo oficial que irá impreso en las boletas de las elecciones de 2015 para diputados federales, primeros comicios en los que competirá el PES, es conformado por círculos y medias lunas que simbolizan a tres personas, cada una pintada de un color; que caracterizan a las ideologías de izquierda (rojo) y de derecha (azul), ambos abajo y la última persona de color morado, que simboliza al PES, según la explicación del propio dirigente nacional.

 

“Unos usan el rojo de izquierda, el azul internacionalmente usa la derecha y nosotros somos el de en medio, el morado; tomamos las mejores causas de  ambas ideologías”, dijo desde sus oficinas en la Ciudad de México.

 

 

Ministros de culto

 

Al avalar su registro como partido político, el Instituto Nacional Electoral (INE) investigó a la dirigencia nacional del PES por las supuestas relaciones con cuatro ministros evangélicos que apoyaron a la organización con aportaciones económicas (por 9 mil 600 pesos) en su camino para ser partido político.

 

Flores Cervantes explicó que esto valió para que su partido fuera blanco de ataques de rivales (del PAN, PRD y PRI); sin embargo, se deslindó de los supuestos nexos financieros con asociaciones religiosas y también negó ser ministro de culto de corte bautista.

 

“No hemos sido notificados de ningún proceso oficioso. El INE hizo una investigación a fondo, cruzaron información con Gobernación, hicieron todo y salieron dos casos de ministros de culto que iban a ser funcionarios en nuestras asambleas, una de ellas en el DF se canceló y la otra en Veracruz no llego el quórum y no quedó registrado”, declaró.

 

A pesar de las investigaciones, el dirigente desconocía que estas dos personas eran ministros de culto, de la misma manera que otro par de casos de personas asociados en una organización religiosa

 

“Nunca hemos recibido dinero de ministros de culto… son casos aislados”, asintió, a la vez que pidió que se investiguen a los demás partidos políticos para ver cuántos asociado religiosos mantienen en sus filas.

 

El abogado de profesión y académico del Centro de Investigaciones y Docencia Económica (CIDE) confesó ser cristiano, como la mayoría de los 320 mil integrantes del PES, aunque aclaró que en ningún momento ha sido pastor.

 

“Hace unos años, a través de un estudio jurídico, legal, de debido proceso, donde tomé el caso Acteal (Chiapas) como ejemplo, hubo gente que se sintió agraviada por mi estudio y comenzó a inventar muchas cosas. Una de esas fue que como muchos de los detenidos fueron presbiterianos, cristianos, pues entonces me relacionaron con que yo era pastor, pero nunca he sido pastor, nunca he oficiado un servicio, pero sí soy cristiano, es mi derecho decirlo”.

 

“Estoy muy orgulloso de mis creencias familiares, es la herencia que me dejaron mis papás, a algunos les dejan cargos políticos a mí me dejaron una herencia cristiana”.

 

Y por el contrario, Flores Cervantes se dice un fanático de la docencia, ha tenido cargos en el PRI, donde militó hace muchos años, pero también trabajó con gobiernos del PRD.

 

Entre sus cargos están los de asesor en materia Internacional en el último año del sexenio del priista Ernesto Zedillo (1999); director general de gobierno del Distrito Federal en el periodo del perredista Marcelo Ebrard, además de asesor en la Cámara de Diputados, Senado de la República y otras asesorías en materia de derecho comercial internacional.

Van por los que no votan

 

Las pretensiones de este nuevo partido, que tiene unos 320 mil afiliados en todo el país, es conservar su registro en los comicios de 2015 y ganar al menos 300 regidurías con candidaturas ciudadanas que promuevan el trabajo asistencial y comunitario que los caracteriza, para que aquellos ciudadanos que no votan, lo hagan por este partido para crear una nueva clase política.

 

No obstante, el presidente de este partido declaró que no se miden con el Movimiento Regeneración Nacional (Morena), que también consiguió el registro como instituto político, debido a que su líder, Andrés Manuel López Obrador, es un actor político relevante, que ha participado en la política desde hace varios años.

 

“El caso Morena se cuece a parte, se va a convertir en un acto político relevante, ellos en las urnas han sido muy exitosos, no podríamos comparar, pero en el Partido Encuentro Social estamos organizados en 382 distritos y no tengo ninguna duda que en los 300 distritos tenemos trabajo político”, declaró.

 

A la organización política, también se le caracteriza por decir “Sí a la vida”, pero no necesariamente estar en contra del aborto; respetar las preferencias sexuales, pero en contra de la legalización de la mariguana.

 

PES domina BC y Veracruz

 

 

La organización política y ultraconservadora, Encuentro Social, que obtuvo su registro ante el Instituto Nacional Electoral con una base de 308 mil afiliados en todo el país, tiene sus principales bastiones en el Estado de México, Distrito Federal, Baja California y Veracruz.

 

Encuentro Social, el cual se autocalifica como el “partido de la familia” y cuyas bases de simpatizantes se encuentran en las iglesias evangélicas, tiene presencia en las 32 entidades de la República.

 

Su informe entregado al INE da cuenta del número de militantes con que cuentan en cada entidad: el Estado de México es su mayor activo con 46 mil 680 ciudadanos, por lo que la organización religiosa tendría más simpatizantes que el PAN en esa entidad.