Aún desmayado, los ex funcionarios panistas, Sergio Eguren y Rafael Medina, y sus dos amigos golpearon al brasileño David Chavez, aseguran las víctimas.

 

Chavez comentó que los mexicanos “fueron unos cobardes” pues se lanzaron a él cuando ya estaba desmayado, ensangrentado e indefenso.

 

Explicó que uno de los mexicanos tocó a su esposa, a lo que Chavez se limitó a decir que ella estaba con él, pero los mexicanos comenzaron a discutir y a empujarlo.

 

De acuerdo con declaraciones que dio el hermano de David, los mexicanos lo siguieron golpeando y pateando aún desvanecido.

 

Chavez quiere que sus agresores sean condenados con todo el peso de la ley, incluso los mexicanos pudieron haberlo matado, aseguró.

 

El brasileño sufrió fracturas en las dos órbitas oculares, un corte en los labios, hematomas en los brazos y piernas, y una sutura en su cabeza.

 

El caso cobró mucha repercusión en Fortaleza, donde el padre de David, Maximiano Leite Barbosa Chaves, es un reconocido médico y Perito General del Servicio Forense del Estado de Ceará.