AMMÁN. El gobierno jordano decidió hoy expulsar al embajador sirio en Ammán, Bahnat Suleiman, al que acusó de ofender a las autoridades del reino hachemí, informó el Ministerio jordano de Exteriores.

 

Las autoridades enviaron a la Embajada siria un memorando en el que se considera a Suleiman persona non grata y se le pide que abandone el país en un plazo de 24 horas, explicó el portavoz Sabah Rafei.

 

En un comunicado difundido por la agencia oficial Petra, Exteriores señaló que el Ejecutivo tomó la decisión después de que el embajador sirio no cambiara su actitud pese a las recurrentes advertencias.

 

Suleiman ha criticado el “liderazgo del reino, sus símbolos, sus instituciones y a sus ciudadanos mediante sus textos y entrevistas con los medios de comunicación y en las redes sociales”, se indica en la nota de Exteriores.

 

“Las ofensas contra Jordania y otros países árabes representan una violación fragante de todas las convenciones diplomáticas”, subrayó Rafei, aludiendo a los comentarios del enviado sirio sobre Arabia Saudí y otros estados del Golfo Pérsico.

 

Exteriores recordó que Jordania acoge a más de 600,000 refugiados sirios que han huido de la violencia en su país desde el inicio del conflicto en marzo de 2011.

 

La decisión del Gobierno jordano se produce tras seis meses de tensas relaciones entre Suleiman y las autoridades de Ammán, y después de que políticos y parlamentarios pidieran su expulsión.

 

Jordania ha intentado mantener una política de distanciamiento de la crisis siria, instando a hallar una solución política que involucre a todas las partes.

 

También lleva a cabo una persecución de los salafistas jordanos para evitar que se unan a las filas de los yihadistas en Siria.

 

Numerosos países, tanto occidentales como árabes, han expulsado a los embajadores sirios de sus territorios en protesta por la represión del régimen, las matanzas de civiles y el uso de armas químicas.

 

La Liga Árabe suspendió por su parte la participación de Damasco en sus actividades en noviembre de 2011 y reconoce a la Coalición Nacional Siria (CNFROS) como el representante del pueblo sirio, aunque no ha otorgado por el momento a este grupo el asiento de Siria en el organismo.