María Marván tomó posesión ayer como la última presidenta del IFE y será ella la que realice, en unos días, la entrega-recepción a los 11 nuevos consejeros del Instituto Nacional Electoral (INE).
De acuerdo con la funcionaria, el nuevo instituto quedaría instalado 24 horas después de que la Cámara de Diputados nombre a los nuevos miembros del INE.
Como parte del acto protocolario, explicó, se realizará una sesión solemne para despedir al Instituto Federal Electoral e, inmediatamente, se convocaría a otra para que los 11 consejeros tomen posesión de sus cargos, para que la nueva autoridad entre en funciones.
Los cuatro actuales consejeros: María Marván, Lorenzo Córdova, Marco Antonio Baños y Benito Nacif podrían quedarse en el INE, debido que están en el proceso para elección, por lo que volverían a tomar protesta.
Por lo pronto, Marván tomó posesión como última presidente del instituto, cargo en el que podría durar sólo unos días porque la Cámara de Diputados tiene como máximo hasta el 30 de abril para nombrar a los 11 nuevos consejeros.
“El final de una época está cerca, concluirá su vida el IFE y habrá de nacer el INE, el reto no es pequeño, la nueva institución no podrá retroceder un ápice de lo conquistado; la construcción de la democracia electoral es la suma de esfuerzo de generaciones que todos debemos honrar”, dijo la consejera.
A unos días de que el IFE deje de existir formalmente, indicó la presidenta provisional, los cuatro consejeros analizan las propuestas de leyes secundarias que darán vida al nuevo instituto.
La consejera consideró que durante los cinco meses que el instituto estuvo sólo con cuatro consejeros y “frente a la feria del sospechosismo” se ha inyectado transparencia a todas y cada una de las bases del proceso electoral”.
A su parecer, “la certeza en las reglas es inversamente proporcional al desconocimiento previo de los resultados. Se han construido vías de impugnación”.
Para Marván “es indispensable el compromiso de los principales actores con el sistema, la democracia es ante todo un compromiso; esa lealtad a las, reglas no necesariamente visible, que debe subyacer en la racionalidad de sus acciones, abonará en el fortalecimiento, tanto de la democracia como de la ciudadanía”.
Por su parte, Lorenzo Córdova, quien está en la lista de aspirantes a dirigir al INE, señaló que los cuatro consejeros y los trabajadores “dieron la cara” por el IFE durante los meses en los cuales se vivió una crisis institucional.
Los últimos meses del instituto fueron de “una de anormalidad extrema; pero que no se ha traducido en ningún tipo de merma ni en la calidad ni en el número de servicios que tanto a los partidos, como a los ciudadanos brinda esta institución”.